Caracas
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció este lunes un proceso para redactar una nueva Constitución, sin voto universal sino por sectores del "pueblo", al cumplirse un mes de protestas opositoras que exigen su salida del poder.
"Convoco (...) para lograr la paz que necesita el país, para derrotar el golpe fascista, una Constituyente ciudadana, no de partidos políticos. Una Constituyente del pueblo", manifestó Maduro ante una multitud de seguidores congregados en el centro de Caracas, por el Día del Trabajador.
Maduro precisó que serán electos unos 500 representantes, una parte por sectores sociales –obreros, campesinos– y la otra por municipios, que formarán la Asamblea Constituyente "popular" que redactará la Carta Magna que sustituirá a la de 1999.
La oposición, que aseguró que con la decisión Maduro consolida un "golpe de Estado" y busca evadir elecciones, llamó a "trancar las calles" a primera hora de este martes y a un fuerte cacerolazo, mientras organizar una "mega" protesta para el miércoles.
"Lo que está proponiendo Maduro en su desesperación es que Venezuela más nunca logre votar en unas elecciones directas, libres y democráticas", manifestó Julio Borges, presidente del Parlamento, único de los poderes que controla la oposición.
LEA: Ocho países de Latinoamérica respaldan oferta del Papa para mediar en Venezuela
El anuncio se produjo en momentos en que miles de opositores marchaban en Caracas para exigir elecciones generales, sin que pudieran llegar al centro, como pretendían, al ser bloqueados con lluvias de gases lacrimógenos por las fuerzas de seguridad.
La Constitución vigente, impulsada por el fallecido presidente Hugo Chávez, fue redactada por 131 constituyentes electos por voto directo, universal y secreto, y luego aprobada en referendo.
Maduro, cuya gestión –que termina en el 2019– rechazan siete de cada diez venezolanos según las encuestas, no precisó qué busca con otra Carta Magna. Siempre, en sus alocuciones, aparece con un pequeña copia de la Constitución.
Para Borges "quiere dar un brinco, de una vez, a un sistema tipo Cuba".
"Frente al fraude constitucional que anunció el dictador. ¡Pueblo a la calle y a desobedecer semejante locura!", llamó el líder opositor Henrique Capriles. El diputado Henry Ramos Allup afirmó que "no es una Constituyente sino una 'prostituyente'".
Reunido tras el anuncio con la cúpula militar y del gobierno en el Palacio de Miraflores, Maduro justificó su decisión señalando que la oposición rechazó el diálogo y las elecciones de gobernadores que debieron celebrarse en el 2016.
Más enfrentamientos
Este lunes hubo fuertes choques en el este y oeste de Caracas. Un grupo de manifestantes ingresó incluso a una base militar tras romper parte de una valla de protección. En otras ciudades también hubo protestas.
LEA: Militares y policías lanzan gases para frenar marcha contra Nicolás Maduro este 1°. de mayo
La convulsión política tiene lugar en una situación económica compleja. El país con las mayores reservas petroleras del planeta sufre una severa escasez de alimentos y medicinas y una inflación, la más alta del mundo, que el Fondo Monetario Internacional (FMI) cifra en 720% para el 2017.
Por el 1°. de mayo, Maduro aumentó el salario mínimo a 200.000 bolívares ($280 a la tasa oficial más alta y $50 en el mercado paralelo), pero lo oposición afirma que Venezuela no saldrá de la crisis mientras el chavismo esté en el poder.
Propuesta de diálogo
El papa Francisco llamó el fin de semana a acabar con la violencia en Venezuela y renovó la oferta de ayudar a un diálogo, pero con "condiciones muy claras", al recordar el fallido proceso que acompañó el Vaticano a finales del 2016.
La oposición reafirmó en una carta su negativa a una negociación "si no hay garantías". "Seguimos sumando aliados en el mundo y el único que queda aislado es Maduro", dijo Borges.
Ocho países latinoamericanos respaldaron al Papa, pidieron negociaciones con "condiciones claras" y liberación de "presos políticos", lo cual fue rechazado por el gobierno como una "injerencia".
Acusándola de impulsar una intervención extranjera, Venezuela inició la semana pasada su retiro de la Organización de Estados Americanos (OEA), mientras que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se reunirá el martes en El Salvador para tratar la crisis.
La oposición acusa a Maduro de instaurar una "dictadura". El mandatario asegura que sus adversarios buscan darle un golpe de Estado y propiciar una intervención extranjera.