Bruselas. El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, dijo este martes que Rusia está dando a entender que desea dialogar, lo cual genera un “prudente optimismo”, pero enfatizó que aún no hay señales concretas de desescalada en la frontera con Ucrania.
"Creemos que hay espacio para un prudente optimismo, hay signos de parte de Moscú sobre su interés en mantener los esfuerzos diplomáticos", dijo Stoltenberg, estimando que el traslado de tropas rusas de la frontera no representa una desescalada real.
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En la jornada, Rusia anunció la retirada parcial de las tropas estacionadas en las proximidades de la frontera con Ucrania. Sin embargo, en una conferencia en Bruselas, Stoltenberg aseguró que las tropas rusas dejaron en su lugar equipos pesados e infraestructura militar, y que ello permitiría un rápido retorno de las tropas a las proximidades de la frontera.
Por eso, el jefe de la OTAN añadió que “por ahora no hemos visto una desescalada, ni hemos visto señales de una reducción en la presencia militar de Rusia en las fronteras de Ucrania”. “Seguiremos monitorando y siguiendo de cerca todo aquello que Rusia está haciendo”, apuntó.
La decisión de Rusia de concentrar unos 100.000 soldados y equipo bélico en las fronteras de ese país con Ucrania, a fines del 2021, hizo encenderse todas las luces de alarma sobre una eventual invasión al territorio ucraniano. En ese cuadro de elevada tensión, Rusia presentó exigencias y garantías de que la OTAN no aceptará el pedido de membresía de Ucrania a esa alianza militar, y la retirada de tropas de la OTAN del Este de Europa.
Los miembros de la OTAN descartaron la posibilidad de cerrar la puerta de la organización a Ucrania, pero se manifestaron dispuestos a dialogar con Rusia sobre sus preocupaciones en materia de seguridad. Países occidentales ofrecieron a Rusia varios diálogos temáticos que incluyen medidas coordinadas de control de armas y mecanismos de transparencia en ejercicios militares.
Este cuadro de tensiones, sin embargo, restituyó el vigor y la unidad interna a la OTAN, una alianza que buscaba desesperadamente recuperarse de la catastrófica retirada de Afganistán.