Túnez. EFE. Los tunecinos vivieron ayer la jornada de reflexión de los comicios presidenciales de este domingo, con los que cierran una larga transición política que comenzó en febrero del 2011 con la caída del dictador Zin al Abedín Ben Ali .
Por primera vez en su historia, Túnez elegirá a su presidente entre 22 candidatos y, si en esta primera vuelta ninguno obtiene mayoría absoluta, los dos con mayor votación pasarán a una segunda vuelta, prevista para finales de diciembre.
Durante 21 días de campaña electoral, los candidatos expusieron sus propuestas políticas para 5,28 millones de tunecinos que pueden votar.
Durante la campaña se retiraron cinco de los 27 aspirantes aceptados por la Instancia Superior Independiente para las Elecciones (ISIE), entre ellos el exdirector del Banco Central de Túnez Mustafa Kamel Nabli, el ministro durante el régimen de Ben Ali Abderrahim Zuari y el líder del partido Wafa, satélite del islamista Al Nahda, Abderrau Ayad.
Entre el resto se ha constatado un pulso entre Beyi Caid Essebsi, favorito y líder de Nidá-Tunis (Llamada por Túnez ), que ganó las legislativas en octubre con 86 escaños , y el actual presidente interino, Moncef Marzuki, quien e se presenta como independiente y está apoyado por diferentes líneas del islám político tunecino.
Dos candidatos se han hecho más visibles y han aumentado el número de asistentes a sus mítines: el multimillonario Eslim Riahi y el histórico líder de izquierda Hama Hamami.
Sin embargo, no participan en las presidenciales Al Nahda, que perdió en las legislativas con 69 escaños y que ha mostrado su neutralidad al no apoyar a ninguno de los 22 aspirantes.
Las intervenciones políticas de los candidatos y la difusión en los medios de estimaciones o resultados de las encuestas comenzarán después del cierre del último de los colegios electorales, como establece el código electoral tunecino.
El silencio electoral acaba a las 2 a. m. de hoy, cuando cierra el último colegio electoral en San Francisco, EE. UU.
Las elecciones en el exterior comenzaron el pasado jueves en Australia y los primeros datos ofrecen un bajo porcentaje de participación.
En Túnez, el Ministerio de Enseñanza Superior anunció que no habrá cursos el próximo lunes, una medida con la que se pretende fomentar la participación de los jóvenes universitarios que votarán en sus regiones de origen y que deberían regresar a la capital para continuar sus estudios.
Por su parte, el Ministerio de Defensa, que ha desplegado a 38.000 militares para garantizar la seguridad, ha comenzado a distribuir material electoral (urnas, papeletas, actas) por los 11.000 colegios repartidos por todo el país.
La ISIE ha reiterado que los colegios abren a las 8 a. m. y cierran a las 6 p. m., con un horario reducido en tres regiones fronterizas con Argelia sometidas a medidas excepcionales de seguridad, Yenduba, El Kef y Kaserín.
Según la Ley Electoral, la ISIE dispone de tres días para anunciar los resultados preliminares aunque la institución ha afirmado que intentará publicarlos en dos días.
Por otra parte, la ley da a la ISIE hasta el 31 de diciembre para organizar la segunda vuelta, aunque el plazo puede verse reducido en caso de que no se presenten muchos recursos ante la Justicia.
Con estas elecciones presidenciales, Túnez culminará la transición democrática que se inició el 14 de enero de 2011, fecha en la que Ben Ali abandonó el país para refugiarse en Arabia Saudí, poniendo fin a 27 años de dictadura.