La invasión de Rusia en Ucrania llegó a su sétimo mes empañada de sanciones, muertes, desplazamientos y referendos de anexión que la comunidad internacional aseguró nunca llegar a reconocer. Mientras Rusia avanza en su contraofensiva, llamando a más voluntarios a la guerra, Ucrania resurge de entre las cenizas y asegura estar recuperando territorios.
Sin duda la guerra del presidente ruso, Vladimir Putin, y su obsesión por recuperar lo que una vez fue la Unión Soviética generó una serie de consecuencias para el mundo, tanto en ámbitos económicos como políticos. Sin embargo, esta invasión a la autonomía de Kiev no solo afectó a los ucranianos, sino también a los rusos, quienes actualmente huyen de las convocatorias a la guerra.
A continuación cinco puntos que resumen la situación actual de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Éxodo
El pasado 21 de setiembre, Putin anunció una “movilización parcial” de 300.000 reservistas rusos en edad para combatir en Ucrania y advirtió a Occidente que está dispuesto a utilizar “todos los medios” para defenderse”.
Este anuncio del mandatario ocasionó que sus ciudadanos se apresuraran a buscar la manera de abandonar el país. De hecho, según la herramienta Google Trends —que permite conocer la frecuencia con la que se escribe una palabra en Google— las búsquedas en Rusia con los términos “billetes” y “avión” se duplicaron ese día.
Dmitri, un ruso de 45 años, dijo a la AFP que dejó a su familia porque él se quiere salvar. “No quiero morir en esta guerra sin sentido. Es una guerra fratricida”, aseguró.
Por otro lado, al día después del anuncio de Putin, Vladimir Tsimlyansky, un portavoz del Estado Mayor, aseguró que al menos 10.000 personas se habían presentado como voluntarias para ser movilizadas a la guerra.
Referendos de anexión
En contra de la comunidad internacional, Rusia efectuó los referendos de anexión en Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, todas regiones ucranianas ocupadas por Moscú.
Como era de esperarse, los comicios, celebrados entre el viernes 23 de setiembre y el martes 27, tuvo un resultado positivo para el “sí” a la anexión a Rusia. “Está claro que una mayoría aplastante de gente ha apoyado la salida de Ucrania y la unión con Rusia”, dijo el jefe de la administración ocupante de Jersón, Vladimir Saldo.
Sin embargo, Ucrania no se deja intimidar por los resultados, pues Occidente nunca reconocerá la anexión de estos territorios.
“No cambiará nada de nuestra política, nuestra diplomacia o nuestras acciones en el terreno militar”, indicó el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, minimizando el valor de estos referendos.
Cruzada de acusaciones
Mientras concluían los referendos, el martes, por otro lado los gasoductos de Nord Stream, entre Rusia y Alemania, sufrieron varias fugas en el mar Báltico.
Es importante recordar que estos gasoductos son objeto de tensiones geopolíticas desde que inició la guerra, pues son explotados por un consorcio dependiente del gigante ruso Gazprom y aunque no están en funcionamiento por la invasión, siguen llenos de gas.
Rusia aseguró estar “muy preocupada” por los daños en los gasoductos, mientras que Ucrania manifestó que probablemente se trate de un “ataque terrorista” planificado por Moscú contra la Unión Europea (UE), acusaciones calificadas por el Kremlin de “estúpidas y absurdas”.
Por su parte, Moscú acusó a Estados Unidos de ejecutar el ataque contra los gasoductos, aseveraciones consideradas como “ridículas” por la Casa Blanca. En busca de esclarecer quién y por qué dañó los gasoductos, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se reunirá el viernes.
Ucrania pide más armas
Con el objetivo de mejorar su equipo de defensa contra Rusia, Ucrania solicitó a la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) y a la UE más ayuda militar, a pesar de las advertencias de Moscú de que podría emplear su arsenal nuclear para proteger esos territorios en caso de anexión.
“Ucrania pide a la UE, a la OTAN y al Grupo de los Siete (G7) aumentar su presión sobre Rusia inmediata y significativamente, incluyendo la imposición de nuevas sanciones, y aumentar significativamente su ayuda militar”, dijo el Ministerio ucraniano de Relaciones Exteriores en un comunicado.
En el documento, Kuleba enumeró: “tanques, aviones de combate, vehículos armados, artillería de largo alcance, material antiaéreo y equipamiento de defensa antimisiles”.
Estados Unidos responde
De su lado, Estados Unidos, fuerte aliado de Ucrania, solicitó este miércoles a sus ciudadanos en Rusia que “abandonen inmediatamente el país” alegando que el Gobierno ruso podría “empezar a negar la doble nacionalidad a los estadounidenses y el acceso a asistencia consular para evitar su salida del país” tras anunciar la movilización parcial.
Minutos después, respondiendo a la solicitud de Kiev, Washington anunció un nuevo paquete de armas y suministros para Ucrania, con un valor aproximado de los $1.100 millones (¢700.000 millones).
La nueva ayuda militar incluye sistemas de misiles Himars y munición, sistemas contra drones, radares y vehículos blindados, según un comunicado del Departamento de Defensa.
Con este tramo nuevo, la ayuda militar de Washington a Ucrania llega a $16.200 millones (¢10,3 billones) desde que comenzó la invasión rusa el 24 de febrero.
Con datos de AFP.