Buenos Aires, Argentina
Policías militarizados dispersaron con balas de goma y gases lacrimógenos a trabajadores de una protesta gremial que se resistieron a ser desalojados cuando bloqueaban la autopista de acceso al mayor aeropuerto de Argentina, en una protesta que llevaba cinco días.
Unos 250 efectivos pertrechados y con carros lanza-agua participaron la mañana del martes de un operativo para desalojar el ingreso al aeropuerto de Ezeiza (al sur de la capital), obstruido parcialmente desde la semana pasada por un reclamo de salarios adeudados por una empresa avícola a punto de quebrar. La empresa daba trabajo a 5.000 obreros.
Un empleado que protestaba exhibió ante las cámaras de televisión su espalda ensangrentada con los impactos de los perdigones de goma. Varios obreros resultaron con heridas en la refriega cuerpo a cuerpo con los gendarmes.
Unas de las cinco centrales obreras, la opositora Central de Trabajadores de Argentina (CTA) repudió en un comunicado "la brutal represión a los compañeros del Frigorífico Cresta Roja".
La represión de la protesta marca el inicio de la implementación de un nuevo protocolo de seguridad bajo el nuevo gobierno del presidente Mauricio Macri, para impedir los cortes de rutas, una habitual forma de protesta en Argentina que genera caos de tránsito y rechazo de buena parte de la población.
En la entrada del aeropuerto internacional de Ezeiza (30 km al sur de Buenos Aires) se vivieron escenas de confusión con gritos, disparos de perdigones y chorros de agua para intimidar a los manifestantes que lanzaban palos y piedras a los gendarmes.
Dirigentes de agrupaciones sindicales de izquierda apoyaron en el lugar a los manifestantes. "Había infiltrados políticos en la protesta", dijeron manifestantes a la televisión.
En los últimos días, decenas de pasajeros se vieron obligados a atravesar el bloqueo caminando y arrastrar sus maletas durante dos kilómetros por un costado de la autopista hasta la estación aérea, para no perder sus vuelos.
"Sufrimos una represión brutal. Ayer (lunes) nos habían dicho que podíamos seguir con el corte si dejábamos dos carriles liberados y hoy vinieron y nos dieron cinco minutos para liberar la autopista por orden de Mauricio Macri. Tenemos entre 10 y 12 heridos", declaró a la prensa Cristian Villalba, delegado de los trabajadores.
Los empleados de la empresa avícola dijeron que aspiran a "pasar la Navidad en paz, queremos la plata de la quincena".
La avícola Cresta Roja, del grupo empresario Rasic, tiene dos plantas industriales, según su página web y, en los últimos meses había recibido subsidios de la provincia de Buenos Aires para evitar la quiebra.
La justicia le ha dado plazo hasta este martes a la empresa para presentar un plan de pagos y de trabajo o, de lo contrario, la conmina a ponerla en venta.
El envío de las fuerzas de seguridad para evitar el bloqueo de rutas y calles muestra un giro en el tratamiento de estas protestas, tras 12 años de haber sido permitidas durante los gobiernos de Néstor Kirchner (2003/2007) y Cristina Kirchner (2007/2015).
"Hace mucho tiempo que el Estado se había corrido de su rol de equilibrar entre dos derechos que colisionan (el de protestar y el de circular)", dijo la vicepresidenta Gabriela Michetti en rueda de prensa después de la primera reunión de Gabinete encabezada por Macri.
Michetti afirmó que "Gendarmería (policía militarizada) cumplió con mandato del juez" de liberar la ruta, y destacó que el operativo se realizó "sin una situación dramática".