Caracas. La líder opositora venezolana María Corina Machado hizo un llamado este martes a los funcionarios judiciales para que no acaten órdenes que violen la Constitución y las leyes, casi dos meses después de que la Corte Suprema convalidara la cuestionada reelección de Nicolás Maduro.
“Es hora de que los funcionarios judiciales sean el rostro del coraje y la dignidad. No acaten órdenes que violen la Constitución. Defiendan a los suyos”, dijo la opositora en un audio difundido en redes sociales.
La petición surgió un día después de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), de tendencia oficialista, rechazara dos solicitudes de revisión de excandidatos opositores sobre la sentencia del pasado 22 de agosto, que convalidó la reelección de Maduro el 28 de julio en medio de denuncias de fraude.
“Las decisiones judiciales que unos pocos toman en contra de la Constitución y de la voluntad del pueblo venezolano son nulas”, continuó la opositora, quien reivindica el triunfo de su candidato, Edmundo González Urrutia, y sostiene que el sistema de justicia no es independiente.
LEA MÁS: Oposición venezolana reivindica ante OEA ‘victoria’ electoral sobre Nicolás Maduro
El Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro reelecto para un tercer mandato de seis años (2025-2031) con el 52% de los votos, sin publicar el detalle del escrutinio, como lo exige la ley, tras alegar un ataque al sistema.
La oposición, liderada por Machado, publicó en una página web copias de actas electorales con las que reclama el triunfo de González, exiliado en España tras una orden de detención en su contra.
Maduro insinuó el lunes, entre risas, que Machado también habría dejado el país. La opositora no se pronunció, aunque en ocasiones anteriores negó la posibilidad de irse al exilio.
Machado también llamó al Ejército a “hacer cumplir” los resultados electorales, algo que fue calificado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, como llamados “sediciosos”.
La oposición presentó más temprano “un informe técnico” ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), donde reivindica una “victoria” de González Urrutia.
Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina desconocieron el triunfo de Maduro y exigen que la autoridad electoral publique los resultados detallados. Las protestas poselectorales dejaron 27 muertos, dos de ellos militares, y más de 2.400 detenidos.