EscucharLa Habana. El sistema eléctrico nacional de Cuba colapsó este miércoles debido a una falla en su principal termoeléctrica, sin dar respiro a los cubanos que enfrentan su tercer apagón nacional en menos de dos meses.
El mandatario Miguel Díaz-Canel expresó que espera un “buen avance” en la recuperación del servicio durante esa jornada.
“Los compañeros del Ministerio de Energía y Minas de Cuba y de la compañía nacional eléctrica UNE trabajan sin descanso y con precisión en su reconexión”, señaló Díaz-Canel en su cuenta de X.
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El Ministerio de Energía y Minas informó en la madrugada que “se produjo la desconexión del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), al salir de operación la termoeléctrica Antonio Guiteras”, la más importante del país, detalló en X.
Según las autoridades, en el transcurso de la mañana se restablecieron circuitos independientes de generación eléctrica en todas las provincias del país, especialmente aquellos que abastecen a hospitales. Sin embargo, la gran mayoría de los 10 millones de habitantes de la isla continuaban sin corriente al mediodía.
Orlando Matos, un velador que estaba de guardia cuando empezó el apagón, se queja de que la crisis energética “no da respiro”. “Uno vive bajo la zozobra”, exclamó.
‘Uno se deprime’
Osnel Delgado, un bailarín de 39 años, expresó junto a su esposa, también bailarina: “Uno trata de sobreponerse todo el tiempo a esta situación, pero cuando el medio no te ayuda, uno termina como que no quiere hacer nada. Uno se deprime”.
La falla se produjo tras otro corte generalizado el 6 de noviembre pasado, cuando el huracán Rafael provocó una caída del sistema que duró varios días.
Solo unas semanas antes, el 18 de octubre, otra falla en la misma termoeléctrica, ubicada en la provincia de Matanzas, vecina de La Habana, provocó un apagón nacional de cuatro días.
El ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, explicó que en esta ocasión “las condiciones son más favorables que en la última desconexión”.
“No hubo ningún daño en las unidades de generación del país que estaban en línea”, por lo que se espera que durante el día haya “un porcentaje grande de recuperación” del suministro, señaló el ministerio en X.
En La Habana, la mañana del miércoles se caracterizó por la escasa presencia de personas en las calles. Muchas familias no llevaron a sus hijos a la escuela y empleados estatales fueron informados de que sus empresas no abrirían.
Además de los apagones, dos huracanes y un terremoto han golpeado la isla esta temporada, que dejaron ocho fallecidos y numerosos daños materiales.
Frágil sistema eléctrico
La emergencia energética ocurre cuando está previsto un encuentro en La Habana entre autoridades de Estados Unidos y de Cuba para revisar los acuerdos bilaterales en materia migratoria, la última reunión de este tipo de la administración de Joe Biden.
El gobierno cubano ha reiterado que la crítica situación económica y energética que afecta al país se debe al embargo impuesto por Washington desde hace más de seis décadas. Este bloqueo se endureció durante el primer gobierno de Donald Trump (2017-2021), sin que su sucesor lo haya flexibilizado en general.
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El país cuenta con un sistema de ocho termoeléctricas obsoletas que requieren constante mantenimiento. Además, se integran grupos electrógenos y algunas plantas flotantes generadoras de electricidad que Cuba renta a empresas turcas. Ambas tecnologías dependen de combustible que la isla necesita importar debido a la escasez.
Desde los dos apagones anteriores, la población pasa muchas horas sin servicio eléctrico. En algunas provincias, el corte dura casi todo el día, debido al déficit crónico de generación de electricidad.
En septiembre de 2022, la isla ya había enfrentado un apagón generalizado por el paso del huracán Ian.
Cuba vive su peor crisis económica en treinta años, en medio de la escasez de alimentos, medicinas, combustible y una inflación galopante.
