El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, John Kerry, reemprendió ayer con nuevos bríos la campaña electoral en Florida, criticando el desempeño del presidente George W. Bush en el primer debate televisivo entre ambos.
Kerry inició una gira de dos días por Florida, un estado clave para definir las elecciones del 2 de noviembre, mientras sus asesores se regodeaban en lo que calificaron de clara victoria en el primer debate presidencial, celebrado el jueves en Miami.
En un discurso pronunciado en la Universidad del Sur de Florida, en Tampa, el candidato demócrata volvió a atacar la forma en que Bush condujo la guerra en Iraq, tildando al Presidente de obstinado por negarse a cambiar el rumbo pese al deterioro de la situación y el aumento de la insurgencia en ese país.
“El presidente sigue intentando debatir consigo mismo acerca de eso”, dijo Kerry, apropiándose de una de las frases que Bush había utilizado previamente para ridiculizar a su rival.
“Sigue intentando decir no queremos a alguien que quiera retirarse, no queremos a alguien que flaquee o titubee”, afirmó el candidato demócrata.
“Señor Presidente, nadie habla de retirarse, nadie habla de flaquear y titubear, hablamos de ganar y hacer bien el trabajo”, agregó, entre aplausos.
Bush al ataque
Entre tanto, Bush partió ayer temprano a Pensilvania, donde también reanudó su campaña proselitista con ataques a su rival demócrata.
“Anoche (jueves) el senador Kerry no hizo más que repetir contradicciones que llevan a la confusión”, afirmó Bush, quien respondió punto por punto a críticas lanzadas por su opositor sobre la política antiterrorista y la decisión de invadir Iraq.
“El senador Kerry dijo que Estados Unidos debía pasar una especie de prueba internacional antes de utilizar sus tropas para defenderse. Quiere someter decisiones sobre nuestra seguridad nacional a la aprobación de un gobierno extranjero”, afirmó.
“Seguiré el trabajo con nuestros aliados pero no someteré jamás la seguridad de EE. UU. a un examen internacional”, dijo.