Ciudad de Panamá. El gobierno panameño desmintió este martes las declaraciones del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien afirmó el día anterior que el Canal de Panamá estaba cerrado debido a la falta de agua.
“El Canal de Panamá mantiene sus operaciones abiertas y garantiza el libre tránsito para facilitar la movilidad y el comercio mundial”, manifestó el Ministerio de la Presidencia panameño a través de su cuenta en la red social X (anteriormente conocida como Twitter).
“La información que circula en las redes sociales no es verídica y distorsiona la realidad”, añadió el gobierno panameño en un mensaje dirigido al presidente colombiano.
La reacción del gobierno panameño surge después de que Petro, en la misma red social, afirmara que el Canal de Panamá estaba cerrado debido a “la sequía”, acompañando su mensaje con un video en el que se pueden observar buques aparentemente detenidos.
También el lunes, durante su conferencia de prensa matutina, el presidente de México, Andrés López Obrador, se refirió a la situación “excepcional” por la que atraviesa la ruta panameña, afectada por la escasez de agua como resultado de la sequía.
El Canal, que utiliza alrededor de 200 millones de litros de agua dulce por cada embarcación que cruza sus aguas, está enfrentando una sequía debido a la escasez de lluvias causada por el cambio climático y el fenómeno de El Niño.
Esta situación obligó a las autoridades a reducir de 40 a 32 el número diario de buques que pueden cruzar esta ruta, lo que resultó en largas filas de embarcaciones en los accesos.
Según la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), normalmente alrededor de 90 buques esperan para cruzar el Canal, pero actualmente esa cifra se elevó a unos 120 barcos.
El Canal de Panamá, que se extiende a lo largo de 80 kilómetros, se estima que es utilizado para el 6% del comercio marítimo global. Sus principales usuarios son Estados Unidos, China y Japón.
La ACP expresó en un comunicado el martes que su compromiso con la vía sigue siendo “inquebrantable” para seguir siendo “una opción confiable y sostenible para la comunidad naviera mundial”.
“Nuestro objetivo principal sigue siendo mantener la confiabilidad de nuestro servicio”, agregó la ACP.
Para conservar agua, la ACP también redujo en dos metros el calado de los buques, lo que llevó a una menor capacidad de carga por embarcación.
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“Debemos encontrar soluciones para poder continuar siendo una ruta relevante para el comercio internacional. Si no nos adaptamos, enfrentaremos dificultades”, reconoció recientemente el administrador del Canal, Ricaurte Vásquez.