París. AFP. Un fotógrafo allegado a Liliane Bettencourt y el asesor financiero de la heredera de L'Oreal fueron detenidos hoy por la policía francesa, en un nuevo capítulo de un escándalo familiar en manos de la justicia, que los investiga por abuso de debilidad y presunto fraude fiscal.
El fotógrafo Francois Marie Banier, el asesor financiero Patrice de Maistre, y otras dos personas -el ex abogado de la multimillonaria, Fabrice Goguel, y el gerente de la isla de Arros (archipiélago de Seychelles), Carlos Vejarano- quedaron en detención prventiva, que puede durar 48 horas, indicaron fuentes cercanas a las investigaciones.
Las detenciones están relacionadas con el contenido de unas grabaciones clandestinas de conversaciones de Bettencourt, la mujer más rica de Francia, con sus asesores, entre otros Patrice de Maistre, gestor de su fortuna, en 2009 y 2010.
En ellas se habla de evasión fiscal, de la intromisión del Elíseo (sede presidencial) en el caso judicial que enfrenta a Bettencourt con su hija, y de los vínculos de la multimillonaria con el ministro de Trabajo, ex ministro de Presupuesto y tesorero del partido en el poder, Eric Woerth, y su esposa.
“Estoy organizando un envío a otro país, que será Hong Kong, Singapur o Uruguay”, afirmaba Maistre en esas conversaciones reveladas por el sitio internet Mediapart.
Según Maistre, las cuentas no declaradas al fisco francés de Bettencourt en Suiza tienen depositados 78 millones de euros.
Los abogados de Banier, un fotógrafo conocido en la jet-set, y de Maistre, no quisieron hacer comentarios.
En cambio, Olivier Metzner, abogado de Francoise Bettencourt Meyers, la única hija de Liliane Bettencourt, se congratuló por estas detenciones.
“Es un paso importante porque desde hace meses venimos denunciando a los predadores que rodean a Liliane Bettencourt”, declaró al canal France 2 el reconocido penalista, que defendió al ex dictador panameño Manuel Noriega.
El enfrentamiento entre Liliane Bettencourt, tercera fortuna de Francia con 16.000 millones de euros según la revista Forbes, y su hija, está desde hace meses en el ámbito judicial, luego de que ésta demandara a Banier por "abuso de debilidad" de su madre, de quien obtuvo 1.000 millones de euros en donaciones.
Según Meztner, Liliane Bettencourt, de 87 años, no es responsable de sus actos y por eso su hija volvió a pedir el martes a la justicia que ponga bajo tutela a la multimillonaria, que se declaró apenada y ofendida por la nueva solicitud de su heredera.
“Es un ensañamiento infame de parte de aquella que dice protegerme a través de tantas páginas de diarios”, afirmó Bettencourt en un comunicado.
“Mi hija podría esperar pacientemente mi muerte, en lugar de hacer todo lo posible para precipitarla”, afirmó la mujer más rica de Francia, que dijo aceptar el peritaje médico como reclama su hija.
Para poner fin a las sospechas de fraude fiscal y semanas después de indicar que regularizaría su situación impositiva, la multimillonaria anunció que había pedido a Maistre organizar una “auditoría independiente” de las dos empresas, Tethys y Clymene, que gestionan su fortuna, para demostrar que “sabe gestionar perfectamente los negocios familiares”.
El caso Bettencourt, inicialmente un enfrentamiento familiar en el que se juega una inmensa fortuna, se convirtió en un escándalo político-fiscal que involucró no sólo a Eric Woerth y que puso a la defensiva al presidente Nicolas Sarkozy.
La excontable de Bettencourt, Claire Thibout, dijo a la policía que en marzo de 2007 Maistre le dio a Woerth 150.000 euros en efectivo para la campaña presidencial, lo que constituiría una financiación ilegal en Francia.
Maistre era también desde 2007 el jefe de Florence Woerth, la esposa del ministro que gestionaba parte de la fortuna de Bettencourt.