Washington. El gobierno del presidente Joe Biden está determinado en mantener un diálogo con Cuba siempre que éste promueva “los intereses estadounidenses”, informó el Departamento de Estado tras una reunión bilateral sobre seguridad realizada este miércoles en Washington.
La Habana aclaró, por su parte en un comunicado, que este encuentro "no contradice el más absoluto rechazo a la inclusión injustificada y arbitraria de Cuba" en la lista negra de patrocinadores del terrorismo del Departamento de Estado estadounidense.
Este diálogo “mejora la seguridad nacional de Estados Unidos a través de una coordinación de las fuerzas del orden”, lo cual “permite proteger mejor a los ciudadanos estadounidenses y llevar ante la justicia a los criminales”, señaló el Departamento de Estado estadounidense en un comunicado.
Washington estimó que estrechar canales de cooperación policial “mejora la defensa de los derechos humanos por parte de Estados Unidos”, que impuso un embargo económico a la isla caribeña por más de seis décadas. Y sostuvo que el tema de derechos humanos “forma parte de todas las conversaciones” bilaterales.
El embargo económico de Estados Unidos a Cuba, son una serie de leyes, que solo pueden ser derogadas por el Congreso, que entre otras cosas, prohíben a empresas estadounidenses o sus subsidiarias, realizar negocios con la isla. Este embargo, fue impuesto el 14 de marzo de 1958, por el presidente, Dwight Eisenhower y reforzadas por John F. Kennedy, a inicios de los años 60.
Al menos 500 personas recibieron condenas de hasta 25 años por participar en las históricas manifestaciones antigubernamentales del 11 de julio de 2021. Organizaciones de derechos humanos y la embajada de Estados Unidos en la isla elevan esa cifra hasta mil.
Por su parte, la cancillería cubana informó en un comunicado que durante la reunión entregó “informaciones y propuestas de cooperación a la parte estadounidense sobre actividades de personas radicadas en los Estados Unidos, identificadas por su vinculación al terrorismo”.
A principios de diciembre Cuba publicó una lista de 61 personas y una veintena de organizaciones, la mayoría residentes en Estados Unidos y bajo investigación penal en la isla por su supuesta relación con actos terroristas.
Figuran, por ejemplo, personas que Cuba vincula con atentados fallidos contra el fallecido líder de la revolución Fidel Castro (1926-2016) o que acusa de promover desórdenes públicos antes y durante las históricas protestas de 2021.
En el encuentro, las partes conversaron de cooperación en temas como el tráfico ilegal de migrantes, narcotráfico y otros flagelos, añadió la cancillería cubana.
Este diálogo sobre seguridad se inició en 2015 bajo el mandato de Barack Obama, de quien Biden fue vicepresidente, a raíz del restablecimiento de lazos diplomáticos bilaterales. Además en 2016, el expresidente, Obama, fue el primer presidente estadounidense en visitar la isla en casi dos décadas.
Entre 2015 y 2018 los dos antiguos enemigos durante la Guerra Fría celebraron cuatro diálogos de este tipo, que desembocaron en 2017 en la firma de un acuerdo de cooperación, pero el expresidente Donald Trump (2017-2021) puso fin al acercamiento y volvió a incluir a Cuba en la lista de países que patrocinan el terrorismo, en la cual continúa bajo el mandato de Biden.