El más emblématico de los movimientos políticos palestinos, el Fatah, propuso ayer a Israel un alto el fuego “mutuo e inmediato”, según un comunicado del Consejo Revolucionario de la organización (CRF) divulgado en Ramalá, Cisjordania, al término de una reunión de tres días.
El CRF “insta al gobierno de Israel a un alto el fuego mutuo e inmediato”, según el texto, publicado por la agencia de noticias palestina Wafa.
El comunicado insiste en que el Fatah “se opone por principio a los ataques que tienen como blanco a civiles palestinos e israelíes así como a los asesinatos, bombardeos y destrucciones de casas”.
En el comunicado no hay ninguna referencia a una posible disolución de las Brigadas de Mártires al-Aqsa, grupo armado vinculado al Fatah que reivindicó varios atentados israelíes.
El texto recalca el “compromiso del Fatah con una paz basada en resoluciones internacionales, las conclusiones de las cumbres árabes, la visión del presidente estadounidense George W. Bush (sobre la coexistencia de dos Estados) y la ‘hoja de ruta’”, plan de paz internacional para la región.
Llamado a Israel
También pide al Estado hebreo que “reanude las conversaciones de paz, ponga fin a sus incursiones y la ocupación de los territorios autónomos palestinos”.
Por otra parte, en el comunicado se solicita a la comunidad internacional que “se implique con más fuerza en la resolución de este conflicto para obligar a Israel a poner fin a la ocupación y volver a la mesa de negociaciones”.
La reunión del CRF tenía como objetivo poner en marcha varias reformas que den un nuevo vigor al movimiento, creado hace 39 años. Sin embargo, el encuentro mostró las enormes divergencias entre los jóvenes líderes y la vieja guardia del Fatah con respecto a la magnitud y formas de aplicación de estos cambios.
Esta reunión, la primera en tres años, se celebró también en un momento en que el movimiento se enfrenta a acusaciones de corrupción y ausencia de una estrategia coherente.