San Salvador Los excomandantes guerrilleros Facundo Guardado y María Marta Valladares (Nidia Díaz) fueron elegidos ayer candidatos a la presidencia y vicepresidencia, respectivamente, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) para los comicios de marzo de 1999.
La fórmula Guardado-Valladares fue proclamada ganadora con 463 votos frente a los 430 sufragios obtenidos por la exprocuradora para la Defensa de los Derechos Humanos, Victoria Marina Velásquez de Avilés, y el economista Salvador Arias, de un total de 1.034 convencionistas.
La fórmula de Facundo Guardado, Coordinador General del FMLN, y María Marta Valladares, diputada de la Asamblea Legislativa, surgió esta semana, después de que el economista Héctor Dada Hirezi se retirara de la carrera electoral interna del partido, al cual no pertenece.
"Línea reformista"
El FMLN, que había fracasado en dos ocasiones en designar a sus candidatos presidenciales debido a la existencia de dos corrientes internas, proclamó ayer a los aspirantes electos que pertenecen a la "línea reformista", según les han etiquetado analistas políticos y medios de comunicación.
El jefe de la fracción parlamentaria del FMLN, Shafick Handal, uno de los líderes de la "línea ortodoxa", como se ha catalogado, dijo que tras definirse la situación todos los miembros del partido deben apoyar la fórmula electa y pidió trabajar por una victoria sobre el partido de gobierno, Alianza Republicana Nacionalista (ARENA, derecha).
"El proceso democrático interno ha concluído, ahora nos toca apoyar a los candidatos electos y vamos a trabajar por su victoria", afirmó Handal, quien siempre apoyó abiertamente a Marina de Avilés y Salvador Arias.
Previo a la convención del FMLN, que estuvo mejor organizada que en las dos ocasiones anteriores, se realizó una "Marcha de la Unidad", pero abundaron las pancartas y los gritos de apoyo de los distintos grupos a sus fórmulas precandidatas.
La Universidad Centroamericana (UCA), dirigida por jesuitas, publicó ayer un artículo en un matutino local en el que afirma que el FMLN quiso dar una lección de democracia a los demás partidos políticos, pero no vislumbró "lo caro que le iba a salir el experimento".
Agrega que las dos fracasadas convenciones para designar a sus candidatos han debilitado al FMLN, donde "ya no pueden ocultarse las ambiciones de los grupos que medran al interior del partido".