Ciudad de México. Un grupo de hombres armados mataron a 10 personas e hirieron al menos a siete el sábado en un bar en la ciudad de Querétaro, centro de México, informó un responsable de seguridad local.
Los atacantes llegaron en una camioneta al bar Los Cantaritos y abrieron fuego en el interior donde se registró “el fallecimiento de 10 personas”, dijo el secretario de Seguridad Pública de Querétaro, Juan Luis Ferrusca, en un video publicado en las redes sociales.
Al menos “siete más resultaron lesionadas”, agregó Ferrusca.
Los servicios de emergencia llegaron al lugar y “confirmaron que cuando menos llegaron cuatro personas armadas con armas largas a bordo de una camioneta”, agregó el secretario de Seguridad.
Un sospechoso fue detenido y el vehículo utilizado en el ataque fue encontrado abandonado e incendiado, dijo Ferrusca.
Entre las víctimas había tres mujeres, según la fiscalía del estado de Querétaro, que dijo que expertos forenses estaban examinando la escena del ataque y el vehículo.
Querétaro, capital del estado del mismo nombre, está considerada una de las ciudades más seguras de México, donde la espiral de violencia, en gran parte relacionada con el narcotráfico y las bandas, ha causado más de 450.000 asesinatos desde 2006.
La lucha contra los asesinatos y secuestros que ocurren a diario en México es uno de los principales desafíos que enfrenta la presidenta de izquierda Claudia Sheinbaum.
La exalcaldesa de Ciudad de México, que se convirtió en la primera mujer presidenta del país el 1 de octubre, ha descartado declarar la “guerra” a los cárteles de la droga.
En cambio, se ha comprometido a continuar la estrategia de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, de atacar la criminalidad desde las raíces con inversión social y priorizando la prevención.
En el noroeste del país, bastión del cártel de Sinaloa, ha visto un aumento de la violencia desde que el arresto en julio del capo narco Ismael “El Mayo” Zambada en Estados Unidos desatara una ola de luchas internas entre las bandas.
También se ha producido un aumento del derramamiento de sangre en el sureño estado de Guerrero, escenario de prolongadas guerras territoriales entre bandas.
Las autoridades informaron el jueves que los cuerpos sin vida de 11 personas, incluidos dos menores, fueron encontrados abandonados en una camioneta en la capital del estado, Chilpancingo.
Formaban parte de un grupo de 17 personas, presuntos comerciantes ambulantes, que fueron declarados desaparecidos el mes pasado.