Ciudad de Guatemala. ACAN-EFE y Reuters. El Gobierno de Guatemala se jugará su última carta en la cumbre del Movimiento de Países No Alineados (NOAL) para convencer a la mayoría de naciones africanas a que le den su apoyo para acceder a un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
El vicepresidente de Guatemala, Eduardo Stein, acompañado del canciller, Gerth Rosenthal, llegó ayer a La Habana con el propósito de conseguir, al menos, el apoyo de 32 de los 54 países de África.
Esos son los votos que todavía le hacen falta a su país para lograr un asiento como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad.
Según informó recientemente el presidente guatemalteco, Óscar Berger, Guatemala cuenta con el apoyo de al menos 96 países, pero para acceder al puesto son necesarios 128, es decir, que le faltan 32.
Venezuela es el otro fuerte candidato para ocupar un puesto en representación de América Latina en ese organismo.
Antes de viajar a La Habana, el Vicepresidente reconoció ante los periodistas que la presencia de Venezuela en África es mayor que la de Guatemala, pero consideró que los dos países tienen la misma posibilidad de persuadir a esos países.
Venezuela ha insisitido en que tiene los votos necesarios para erigirse en “la voz de los sin voz” dentro del Consejo de Seguridad. El propio presidente, Hugo Chávez, está en La Habana para garantizarse que no haya sorpresas luego.
“Lo ganaremos, aún cuando el imperialismo no lo quiere. El imperialismo gringo está en franca decadencia, no le queda mucho tiempo”, dijo Chávez a los periodistas aludiendo al hecho de que EE. UU. respalda a Guatemala.