Tegucigalpa. (AFP). Honduras considera la posibilidad de establecer relaciones diplomáticas con China luego de décadas de vínculos con Taiwán, declaró hoy la canciller Mireya Aguero.
"Las posibilidades (de establecer relaciones con China) siguen abiertas", afirmó la diplomática.
"En el caso de la República Popular China, es uno de los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, un país de indiscutible posicionamiento mundial, desde el punto de vista económico, político y de inversiones", destacó.
Honduras es parte de una treintena de países que ha mantenido relaciones con Taiwán y ha votado en Naciones Unidas por su reconocimiento como Estado, en contra de la posición de China que la considera como una provincia renegada.
Aguero instó a que "todos como hondureños entendamos que hay objetivos de Estado y de gobierno en las relaciones internacionales, y en ese sentido Honduras considerará tener relaciones diplomáticas con cualquier miembro de Naciones Unidas".
Por su parte, el presidente Porfirio Lobo dijo en una rueda de prensa que China "es un mercado enorme que no ha sido accesible a Honduras y queremos abrirlo y en eso nadie debe molestarse".
Mientras el embajador de Taipei en Tegucigalpa, Joseph Kuo, afirmó que si los hondureños "quieren tener relaciones con China Continental", los taiwaneses "seguiremos manteniendo los lazos comerciales con Honduras " porque "aquí lo más importante es el pueblo".
Honduras mantiene comercio con China y según la prensa local, el gobierno de Lobo estaría interesado en recibir ayuda económica de Pekín.
Durante décadas los países centroamericanos han recibido donaciones en obras de infraestructura, equipamiento o dinero de parte de Taiwán.
Costa Rica es el único país centroamericano que rompió, en la década pasada, relaciones diplomáticas con Taiwan y estableció vínculos con Pekín, que a partir de entonces construyó un moderno estadio deportivo en San José y equipó de vehículos a la policía costarricense.
Taipei mantiene de momento relaciones con todo el resto de la región centoramericana, incluso con la Nicaragua sandinista de Daniel Ortega y con el gobierno socialdemócrata de Mauricio Funes en El Salvador.