La Habana. Rafael se convirtió este miércoles en huracán categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, cuando se acerca a las costas de Cuba, golpeadas hace apenas dos semanas por el ciclón Oscar que dejó ocho muertos en medio de un apagón total en la isla, informó el estadounidense Centro Nacional de Huracanes (NHC).
“Rafael se convierte en un huracán de categoría tres a medida que se acerca a la costa occidental de Cuba”, dijo en su cuenta de X el NHC, y advirtió que pueden ocurrir marejadas ciclónicas potencialmente mortales, vientos huracanados dañinos e inundaciones repentinas en parte del oeste de Cuba.
Las autoridades declararon fase de “alerta” en nueve de las 15 provincias del oeste y centro del país, incluida La Habana.
Medios locales informaron que al menos 70.000 personas fueron evacuadas, incluidas más de 66.000 en Guantánamo (este), la región más afectada por Oscar, que azotó el 20 de octubre, y donde esta semana seguía lloviendo.
Según el diario oficial Granma, se suspendieron “las operaciones aéreas” en la región occidental del país. La medida incluye a los aeropuertos de La Habana y del famoso balneario de Varadero, en la provincia de Matanzas.
Las clases también se suspendieron en varias provincias. En La Habana y otras localidades del oeste de Cuba se interrumpió el servicio de transporte público de pasajeros.
Miles de personas fueron evacuadas en Cuba
“No hay ni un alma aquí”, dijo a esta agencia Marisol Valle, una mujer de 63 años, mientras trataba de llevarse algunos muebles antes de que el agua alcanzara su hogar cercano al mar, en Guanimar, un pueblo pesquero a unos 70 kilómetros de La Habana.
La presidencia de Cuba informó el martes en su cuenta de X que “el Consejo de Defensa Nacional se activó” para tomar la dirección del país. Se trata de una medida para “situaciones excepcionales y de desastre”, indicó.
El presidente Miguel Díaz-Canel, quien dirige este órgano, supervisó las acciones de los grupos responsables de alimentos, energía, transporte, construcción y salud.
Cuba trata de recuperarse de los daños causados por Oscar a finales de octubre, cuando ocurrió un apagón general de cuatro días tras una avería en la termoeléctrica más importante y por la falta de combustible.
Problemas eléctricos
Desde el apagón masivo, el país sufrió numerosos cortes debido al déficit crónico de generación de electricidad. En septiembre de 2022, la isla ya sufrió un apagón generalizado tras el paso del huracán Ian por el oeste.
La disponibilidad de energía este miércoles “va a depender mucho de las afectaciones que provoque el huracán”, declaró a la televisión cubana el ingeniero Lázaro Guerra, director de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas.
El restablecimiento total de la electricidad tardó varios días en La Habana y varias semanas en las zonas afectadas.
En La Habana, donde viven dos de los diez millones de habitantes del país, brigadas de obreros aceleraron el martes las labores de drenaje de alcantarillas, recolección de desechos sólidos y poda de árboles.
Las graves inundaciones de Oscar sorprendieron a los habitantes de dos localidades de Guantánamo, San Antonio del Sur e Imías, donde se registraron ocho muertos.
Cuba enfrenta su peor crisis económica en treinta años. El apagón masivo se suma a los crónicos cortes de electricidad y a una escasez de alimentos y medicinas en medio de una inflación galopante.