Ciudad de Panamá. Tres millones de haitianos sufren la violencia armada y la situación se deteriora a diario en el país, advierte Marisela Silva, jefa del Comité Internacional de la Cruz Roja para Panamá y el Caribe (CICR).
Silva, que es peruana y viajó recientemente a Haití, reclama ayuda internacional "lo más pronto posible" para enfrentar la "crisis humanitaria" generada por la violencia de las pandillas.
Haití, el país más pobre de las Américas, atraviesa una profunda crisis exacerbada desde el asesinato del presidente Jovenel Moise en 2021. Más de 500 personas fueron asesinadas por bandas criminales en el primer trimestre de este año, de acuerdo con la ONU, que pidió en marzo el despliegue de una fuerza de apoyo especializada.
Este es un resumen de la entrevista con Silva en Panamá, sede regional de la CICR, realizada el miércoles.
- ¿Qué conclusiones saca de su reciente visita a Haití?
- Desafortunadamente para la población haitiana, la situación en Puerto Príncipe cada vez se deteriora aún más. Tengo prácticamente dos años y medio visitando y acompañando a nuestro equipo allá y la violencia armada se aproxima mucho más a las zonas residenciales. Hay señales de expansión de la violencia armada también en otras zonas del país.
- ¿En qué áreas necesita ayuda Haití?
- Tenemos tres millones de personas (ndlr: de una población total de 11,4 millones) aproximadamente afectadas por la violencia armada y eso tiene un impacto a nivel de su falta de acceso a servicios básicos de salud, restricciones de movimiento y la imposibilidad de acceder a servicios esenciales.
- ¿Es la violencia el mayor problema que enfrenta Haití?
- Hay muchas problemáticas que coexisten. Una de ellas, efectivamente, es una violencia armada de alta intensidad, pero hay una problemática económica que pone presión sobre la población y una en términos de saneamiento que desafortunadamente genera un caldo de cultivo para una epidemia de cólera.
“Crisis más mediáticas”
- Haití, la ONU y algunos mandatarios están pidiendo un fondo de ayuda urgente. ¿Lo ve viable?
- Es necesario para la comunidad internacional tener una acción firme para poder habilitar esta respuesta humanitaria frente a las necesidades de una población extremadamente vulnerable. El sufrimiento y la afectación de la población requiere de una respuesta firme y oportuna.
- ¿En cuánto valora la Cruz Roja esa ayuda internacional?
- Es un apoyo que no puede ser medido necesariamente de manera monetaria, pero debe ser sostenible. Si hoy uno compara el impacto de la violencia armada en Haití con Ucrania, con ese conflicto armado devastador, podemos sorprendernos en identificar que en una misma semana puede haber muchos más muertos y heridos en un contexto como el de Haití que en un contexto como el de Ucrania, Afganistán, Yemen o Siria. El punto es que todas estas crisis, así como la haitiana, merecen atención de parte de la comunidad internacional y un apoyo comprometido.
- ¿Por qué cree que está tardando en llegar esa ayuda?
- Hay tres razones principales: la primera es la fatiga de una comunidad internacional que invirtió por muchos años en el contexto haitiano. El segundo elemento es que los Estados están sufriendo una recesión económica. Y el tercer elemento es que hay crisis que son, de una u otra manera, mucho más mediáticas, como el conflicto en Ucrania.
”El huevo o la gallina”
- Estados Unidos y varios presidentes que participaron en la Cumbre Iberoamericana hablan de elaborar un plan para pacificar Haití antes de mandar cualquier ayuda. ¿Cree la Cruz Roja en esta propuesta?
- Como CICR, sobre la base de nuestros principios de imparcialidad, neutralidad e independencia, no nos compete pronunciarnos. Lo que sí podemos decir es que cuando se plantea la secuencia entre ayuda y pacificación es la pregunta del huevo y la gallina: ¿Qué es primero?
- ¿Qué consecuencias cree la Cruz Roja que puede tener la construcción del muro que levanta el gobierno dominicano para frenar la migración de haitianos?
- Las medidas que los Estados puedan tomar en relación a los flujos migratorios deben de estar siempre alineadas con sus respectivas obligaciones internacionales en materia de protección de las personas.
- ¿Está condenado Haití a seguir siendo el país más pobre de América?
- La esperanza de que esa condena no sea tal es algo que no podemos perder.