México. Más de 5.000 elementos de fuerzas civiles son desplegados esta semana en distintas zonas de México, entre ellas el balneario de Cancún, donde se ha registrado un repunte en la violencia, informó este martes la secretaría de Gobernación (interior).
"Son más de 5.000 efectivos de fuerzas civiles federales (...). No están participando en este operativo o despliegue ni Ejército mexicano ni Marina" Armada, dijo a la prensa el secretario de Gobernación Alfonso Navarrete.
Los elementos, en su mayoría policías federales, han sido desplegados en Tijuana, fronteriza con la estadounidense San Diego, y el corredor que une al balneario de Los Cabos con la Paz, en el estado de Baja California Sur.
Cancún, en el Caribe y el destino turístico mexicano que capta más turistas extranjeros, es otro de los puntos donde estos elementos federales son desplegados luego de que se han registrado algunos hechos violentos en su zona urbana.
El despliegue se realiza también en puntos de los estados de Colima y Jalisco y en la ciudad de Chilpancingo, capital del sureño estado de Guerrero, uno de los más violentos en México.
Navarrete añadió que el despliegue tiene por objeto "disminuir en un corto plazo estos niveles de crecimiento de violencia" y ejecutar órdenes de captura de la fiscalía general.
México es golpeado por una ola de violencia ligada al narcotráfico que se ha recrudecido en los últimos años. En 2017 se registraron 25.339 asesinatos, el año más violento desde que inició el registro oficial, en 1997.
Desde diciembre de 2006, cuando el gobierno federal lanzó un polémico operativo militar antidrogas, suman más de 200.000 asesinatos, aunque las cifras oficiales no detallan cuántos casos estarían ligados al crimen organizado.
Este despliegue de fuerzas civiles se realiza en momentos en que la Suprema Corte mexicana analiza controversias de inconstitucionalidad contra la ley de seguridad interior, votada en diciembre, que permite al Ejecutivo ordenar despliegues militares en zonas violentas.
El presidente Enrique Peña Nieto promulgó la ley pero aseguró que no la aplicaría en espera de que la Suprema Corte se pronuncie.
El despliegue militar antidrogas, que según sus críticos ha propiciado mayor violencia, se ha venido realizado en medio de un vacío legal.