Las personas que están pensando en remodelar, rediseñar o redecorar su casa o algún otro espacio, deben contar con el asesoramiento de profesionales que puedan identificar y resolver problemas asociados a estas labores.
En el mercado, es común escuchar hablar de especialistas en diseño de interiores (interioristas) y de decoradores. ¿Son lo mismo? La respuesta es no. Si bien son dos profesiones muy relacionadas, lo cierto es que ambas intervienen el espacio interior, pero de manera muy diferente.
"Cuando un decorador entra en un espacio, estudia la luz, los materiales, los tejidos, los acabados, los muebles, entre otros elementos ya existentes; su función es tratar de manera superficial el espacio (pintar, adornar, revestir) con la finalidad de generar un determinado ambiente", señala el sitio mexicano www.tallerveinticuatro.com
La web agrega que el decorador logra su trabajo interpretando los entornos creados por el arquitecto o el diseñador de interiores y dándoles forma a su manera para reflejar un estilo. Este depende en gran medida del cliente o del proyecto.
Dalila Andrade, diseñadora de interiores, aclaró que en su profesión se indagan y acogen recursos relacionados con la psicología ambiental, la arquitectura, ingenierías y diseño de productos, además de la decoración tradicional.
"Un profesional de interiores puede encarar proyectos de diseño residencial o comercial, paisajismo, diseño escenográfico y de mobiliario, así como participar en remodelaciones residenciales y comerciales, vitrinismo e iluminación, entre otras tareas", detalló.
Diferencias
Tallerveinticuatro.com afirma que "un interiorista generalmente se involucra en el proyecto desde el principio o muy temprano en el proceso, a diferencia del decorador, quien no participa en el diseño y distribución de la obra".
Además, con su trabajo, el interiorista proporciona bienestar a la salud física, mental, emocional y espiritual de las personas.
"Un diseñador de interiores profesional genera un valor agregado en la sociedad contemporánea. Puede contribuir a aumentar la eficiencia en el desempeño laboral, mejorar las relaciones interpersonales, incrementar la calidad de vida y el confort del usuario", indicó Liudmila Kikisch, directora de la Escuela de Diseño del Espacio Interno de la Universidad Veritas.
Dalila Andrade concluyó señalando que cada uno de estos enfoques puede ser ejecutado, según el alcance, por el diseñador de interiores, o bien de forma multidisciplinar con arquitectos, ingenieros u otros especialistas.