Madrid. Seis meses después de habérsela quitado, los españoles tendrán que volver a partir del jueves a llevar mascarilla en el exterior para contener el avance del covid-19, que alcanzó un récord de casi 50.000 nuevos casos en las últimas 24 horas, anunció el gobierno este miércoles.
España, uno de los líderes mundiales de la vacunación, registró el martes un récord nacional de 49.823 nuevos casos de covid-19 en 24 horas y la variante ómicron, más contagiosa, representa ya casi la mitad de los nuevos casos, según el ministerio de Sanidad.
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“Se establece la obligatoriedad de uso de mascarillas en exteriores”, subrayó un comunicado del gobierno. El texto fue difundido al mismo tiempo que se celebraba una reunión extraordinaria entre el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, y los líderes de las comunidades autónomas del país para tratar las medidas contra la propagación de la variante ómicron.
“La máscara ha demostrado en los últimos meses ser una herramienta eficaz en la prevención”, manifestó Sánchez. El jefe de Gobierno aseguró que habría algunas excepciones: practicar deporte, estar solo —o con convivientes—, en un espacio natural como la montaña o la playa. Sánchez explicó que esta medida era “temporal” y que se retiraría “lo antes posible”.
A tiempo para Navidad
Pocos países del mundo apostaron por esta medida, la mayoría no obligan a llevar mascarilla al aire libre cuando se respetan distancias de seguridad.
En España se impuso a partir de los seis años en mayo del 2020, en plena primera ola y se levantó esta medida gracias a la mejora de la situación, el 26 de junio, siempre que hubiera una distancia de 1,5 metros entre dos personas. Sin embargo, muchos españoles seguían llevándola en exteriores.
No obstante, esta nueva ola, la sexta de la pandemia en España, parece de momento menos grave que las anteriores: el martes, los pacientes con covid-19 ocupaban el 15% de las camas de unidades de cuidados intensivos, cuando eran el 30% a mediados de enero de 2021, según las cifras del ministerio de Sanidad.
La incidencia por habitante era de 695 casos por cada 100.000 en los últimos 14 días, una cifra casi cuatro veces mayor que el primero de diciembre. En España, la gestión de los medios sanitarios es una competencia de las comunidades, aunque el ejecutivo central puede decidir directamente por decreto el uso de las mascarillas.
Vuelve el toque de queda
Con la vista puesta en la Navidad, varias comunidades españolas llevaban semanas pidiendo al gobierno central el endurecimiento de las medidas sanitarias. Algunas, como Cataluña (una de las más pobladas), exigen incluso la vuelta de restricciones más drásticas.
De momento, Cataluña espera la autorización judicial para imponer un toque de queda entre la 1:00 a.m. y las 6:00 a.m., así como cerrar las discotecas a partir del jueves por la noche. Además, varias comunidades —entre las que no está Madrid, donde se encuentra la capital—, obligan a presentar un pasaporte sanitario para poder entrar en determinados lugares públicos.
El futuro decreto contendrá otra nueva medida: la validez de la vacunación se establecerá a partir del primero de febrero del 2022 en nueve meses tras la inyección de la segunda dosis. El gobierno anunció también la “intensificación” y la “aceleración” del proceso de vacunación, con objetivos cuantificados respecto a la tercera dosis, el 80% de vacunados entre los 60-69 años.
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España es uno de los países que más población vacunada tiene, con el 89,7% de los mayores de 12 años con la pauta completa. También es de los primeros de Europa que lanzó la vacunación de los niños de entre 5 y 11 años, el 15 de diciembre.
Desde el inicio de la pandemia, el total de casos se sitúa por encima de los 5,5 millones de contagiados, y los muertos están cerca de los 89.000, en un país de casi 47 millones de habitantes.