Kandahar. El jefe supremo de Afganistán declaró el domingo que las mujeres que viven en el país han sido “salvadas” de las “opresiones tradicionales” por el régimen talibán, pese a que este multiplicó las medidas liberticidas en su contra desde que retomó el poder hace casi dos años.
En una declaración escrita con ocasión de la festividad del Aid Al Adha, que comienza el miércoles, Hibatullah Akhundzada, que dirige el país desde Kandahar y cuyas apariciones en público son escasas, aseguró que las medidas que ha adoptado su gobierno desde que recuperó el poder en agosto de 2021 fueron tomadas para garantizar a las mujeres “una vida cómoda y próspera conforme a la sharia (la ley islámica)”.
“Los aspectos negativos de los últimos 20 años de ocupación relacionados con el hiyab de las mujeres y el desvío del buen camino terminarán pronto”, agregó.
La Organización de Naciones Unidas mostró su “profunda preocupación” la semana pasada por que el régimen talibán pudiera haber instaurado un “apartheid de género” en Afganistán.
En los últimos 22 meses, las mujeres han sido excluidas de la mayoría de centros de enseñanza secundaria, universidades y administraciones publicas, y ya no pueden trabajar en oenegés internacionales, salvo de ciertos sectores. Sus presencia en el espacio público está fuertemente restringido.
Akhundzada alegó que su gobierno había tomado “medidas necesarias para mejorar la situación de las mujeres, que constituyen la mitad de la sociedad”.
Recordó que un decreto de seis puntos publicado en diciembre de 2021 prohibía los matrimonios forzados y garantizaba el derecho a la herencia y al divorcio.
“Todas las instituciones han sido obligadas a ayudar a las mujeres a garantizar el cumplimiento de sus derechos en el matrimonio, la herencia y otros derechos”, afirmó el jefe supremo afgano.
En un informe presentado la semana pasada en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Richard Bennett, relator especial para Afganistán, advirtió que la situación en el país para las mujeres era “una de las peores del mundo”.
La “discriminación grave, sistemática e institucionalizada contra las mujeres y las niñas se encuentra en el núcleo de la ideología y del gobierno de los talibanes”, afirmó Bennett.
Akhundzada, que rara vez aparece en público, suele pronunciarse con motivo de las festividades musulmanas.
“A nivel nacional, se ha restaurado la independencia de Afganistán una vez más”, señaló en su comunicado.
También elogió la resiliencia económica del país y los esfuerzos desplegados para erradicar el cultivo de amapola y mejorar la seguridad nacional.
“Es nuestra responsabilidad común proteger y servir a nuestro sistema islámico”, recordó.