Madrid. Las difíciles condiciones climatológicas golpean con fuerza a Europa y el sector sur de Asia.
España y Francia tratan de sortear las altas temperaturas y en la India las inundaciones ya cobran decenas de fallecidos.
La ola de calor precoz que golpea el sur de Europa desde hace varios días se extendió y amplificó este sábado a toda Francia, donde se esperan récords de temperaturas, mientras en España los bomberos siguen luchando contra un incendio gigante
La casi totalidad del territorio francés se ve afectado, con varios departamentos de la fachada atlántica y del sudoeste en vigilancia roja, el nivel más alto, y temperaturas que podrían llegar localmente a los 42°C.
El viernes fueron batidos en Francia récords de calor para junio en al menos 11 municipios, entre ellos Carcasona (sur), donde se registraron 40,4°C
La multiplicación de olas de calor en Europa es consecuencia directa del calentamiento global. Las emisiones de gas de efecto invernadero incrementan la potencia, la duración y la reiteración de las olas de calor, según los científicos.
Varios acontecimientos festivos, deportivos y culturales fueron anulados en los departamentos franceses en vigilancia roja y los alumnos de primaria y secundaria fueron liberados el viernes de la obligación de ir a los centros educativos.
En Francia se han tomado medidas especiales en las residencias de ancianos, todavía marcadas por la mortal ola de calor de 2003, que dejó más de 15.000 muertos.
A partir del sábado por la noche, podrían producirse tormentas en la fachada atlántica francesa, lo que permitirá un “retroceso progresivo” de la canícula, que quedaría circunscrita a la parte este, informço Météo-France.
Evacuaciones en España
En España los bomberos seguían luchando este sábado contra los incendios, uno de los cuales ya ha devastado 20.000 hectáreas en el noroeste, en lo que se espera sea el último día de la ola de calor
El incendio más importante obligó a las autoridades a evacuar a centenares de habitantes de 14 localidades en la Sierra de la Culebra, un macizo montañoso de la región de Castilla y León, cerca de la frontera con Portugal.
Según las autoridades regionales, parte de los residentes pudieron volver a sus casas el sábado por la mañana, ya que las llamas se alejaron de sus viviendas.
Por otra parte, los bomberos seguían luchando contra otros incendios en Caudiel, en la región de Valencia (este), o en Artesa de Segre, en Cataluña (noreste), donde un incendio ya ha devastado 1.600 hectáreas
En cambio otros incendios estaban ya bajo control, en especial en el valle de Avila (oeste), y en la región de Toledo (centro), donde cerca de 900 hectáreas se quemaron cerca de un parque de atracciones desde el cual fueron evacuadas 3.000 personas.
España está sufriendo una excepcional ola de calor desde hace casi una semana, con temperaturas superiores a los 40º C en varias regiones.
Esta canícula debe terminar el domingo, gracias a una masa de aire más frío procedente del oeste, según la agencia española de meteorología Aemet
España, que ya ha vivido el mes de mayo más cálido desde el principio del siglo, ha sufrido cuatro episodios de temperaturas extremas en los últimos diez meses, incluida la actual ola de calor.
“Desastre humano”
En Alemania, la ola de calor empezó el viernes, y este sábado las temperaturas podrían elevarse hasta los 40ºc.
Se han declarado ya al menos dos incendios, uno en Brandenburgo, la región en torno a Berlín que ha asolado 60 hectáres, y otro controlado ya en el valle de Trektal, al sudoeste de la capital, que quemó 6,5 hectáreas de bosque.
“Ya es hora de actuar, cada acción cuenta” declaró el secretario ejecutivo de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), Ibrahim Thiaw, en una conferencia que se celebra en Madrid.
La ONU llamó el viernes a “actuar ahora” contra la sequía y la desertificación, para evitar “desastres humanos”.
Más de 59 muertos por lluvias torrenciales en India y Bangladés
Las lluvias monzónicas en India y Bangladés causaron al menos 59 muertos y millones de personas se vieron afectadas por las inundaciones, informaron el sábado las autoridades.
Las inundaciones amenazan regularmente a millones de personas en Bangladés, un país de baja altitud. Sin embargo, los expertos afirman que el cambio climático está aumentando su frecuencia, su gravedad y su carácter repentino.
Gran parte del noreste del país está bajo el agua y se han desplegado tropas para evacuar a las personas aisladas.
Varias escuelas se convirtieron en refugios de emergencia para alojar a los habitantes de las aldeas que se inundaron en pocas horas.
“El viernes por la mañana toda la aldea estaba bajo el agua y todos estábamos aislados”, dijo Lokman, cuya familia vive en la aldea de Companyganj.
“Tras esperar todo el día en el tejado de nuestra casa, un vecino nos rescató con una barca improvisada. Mi madre dijo que nunca había visto una inundación así en su vida”, añadió este joven de 23 años.
Dos días sin comer
Asma Akter, otra mujer rescatada de las inundaciones, explicó que su familia no había comido desde hacía dos días.
“El agua subió tan rápido que no pudimos llevarnos ninguna de nuestras pertenencias”, dijo.
Desde el viernes, los rayos caídos durante las fuertes lluvias mataron a 21 personas en Bangladés, indicaron responsables de la policía.
Entre ellos figuran tres niños de entre 12 y 14 años que perecieron en la ciudad de Nandail, informó el jefe de la policía local, Mizanur Rahman.
Otras cuatro personas murieron en deslizamientos de tierra provocados por las tormentas en la ciudad portuaria de Chittagong, dijeron oficiales de policía.
En la vecina India, al menos 16 personas fallecieron el jueves en el estado de Meghalaya (noreste) tras corrimientos de tierra y riadas que anegaron carreteras, informó en Twitter Conrad Sangma, primer ministro de este estado.
En el estado de Assam, más de 1,8 millones de personas se vieron afectadas por las inundaciones, tras cinco días seguidos de lluvias.
El primer ministro de este estado, Himanta Biswa Sarma, dijo a la prensa que había pedido a los responsables del distrito suministrar “toda la ayuda y los equipos de rescate necesarios” para las personas afectadas por las lluvias torrenciales.
En Bangladés, las inundaciones obligaron a cerrar el viernes el tercer aeropuerto internacional del país, situado en Sylhet, en el noreste.
Y la situación en la región se agravó el sábado por la mañana, tras un aumento de las precipitaciones el viernes por la tarde, declaró Mosharraf Hossain, administrador jefe del gobierno de la región de Sylhet.
“La situación es mala. Más de cuatro millones de personas están bloqueadas por las inundaciones”, dijo, añadiendo que prácticamente toda la región estaba sin electricidad.
Según las previsiones meteorológicas, las inundaciones se agravarán en los próximos dos días en Bangladés y el noreste de India debido a las fuertes lluvias.