Canberra. Un cuadro de problemas estomacales entre dolor, vómito y náuseas hicieron que Gemma Farquhar, una australiana que en el momento en que comenzaron sus síntomas tenía 35 años, fuera diagnosticada con cáncer colorrectal.
Actualmente, a sus 37 años, Farquhar utiliza sus redes sociales para concientizar a las personas sobre cuáles son los síntomas de esta enfermedad para que no les suceda como a ella, a quien varios doctores pasaron por alto y diagnosticaron con simples infecciones estomacales o parásitos.
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A pesar de que Farquhar presentó durante meses vómitos constantes que la llevaban casi semanalmente al médico, fue después de varios meses que, en abril de 2020, le diagnosticaron cáncer colorrectal en fase cuatro.
A partir de ahí, su cuerpo ha sobrevivido varias cirugías. En ese mismo año, en abril, le realizaron una resección del intestino por una obstrucción. En setiembre, tuvo que prepararse para una cirugía sumamente invasiva: una peritonectomía. Este es un procedimiento complicado que consiste en extraer del cuerpo algunos de los órganos con cáncer, para después pasarlos por quimioterapia.
La intervención quirúrgica fue traumática para el cuerpo de Farquhar, donde perdió casi 20 centímetros de intestino, le removieron su útero y las trompas de falopio, entre otros traumas. Además, la recuperación fue lenta y tediosa.
Durante su primera semana post quirúrgica, Farquhar no pudo pararse o digerir ningún tipo de comida o bebida por sí misma, e incluso después de realizarse un proceso tan invasivo, su pronóstico continuaba complicado, con los médicos dándole un 14% de probabilidad de sobrevivir y cinco años de vida.
El nuevo tratamiento consistió en intensas sesiones de quimioterapia que continúan hasta el día de hoy, dos años después, cuando el cáncer ya le ha hecho metástasis en los pulmones. Sin embargo, Farquhar ha tomado estos años para reflexionar sobre la resiliencia y uno de los aspectos más importantes para ella: conocer su cuerpo y ser su propio defensor.
Farquhar peleó con gastroenterólogos, alergólogos y médicos generales que, a pesar de sus constantes visitas a la sala de urgencias y sus síntomas, la devolvían a su casa con medicamentos que ella terminaba vomitando a causa del malestar.
Ella, sintiendo que algo más ocurría en su cuerpo, insistió en que se le realizaran los debidos exámenes para determinar qué era lo que sucedía en su estómago. Luchó por un diagnóstico que, al final, sí resultó ser mucho más complicado que una simple infección estomacal, como muchas veces le habían dicho que era.
Farquhar utiliza sus redes sociales para compartir un poco de su vida y su lucha contra el cáncer, además de la felicidad de ver crecer a sus hijas de 8 y 6 años, a pesar de su diagnóstico. Lo más importante para ella es crear conciencia sobre los síntomas por los que pasó, pero también para hacerle entender a la gente que ella no es un caso aislado.
”Muy a menudo se detecta tarde, lo que impide una intervención temprana. Hay una falta de educación y conciencia al respecto. Necesitamos ser nuestros propios defensores”, comentó Farquhar al medio Daily Mail de Australia.
¿Qué es el cancer colorrectal?
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, es una enfermedad en donde las células en el colon o el recto se multiplican sin control, lo cual puede llevar a que se formen crecimientos de tejido anómalo, que pueden convertirse en cáncer.
En un principio, esta enfermedad no siempre causa síntomas y cuando sí, estos pueden incluir problemas que se relacionan con otras enfermedades como la diarrea, el estreñimiento, cólicos abdominales o sangre en la materia fecal, por lo cual es importante consultar a un médico si alguno de estos sucede y hacerse pruebas periódicas.
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