Nueva York. Hospitales de campaña en Central Park o en el estadio que acoge el US Open ilustran la metamorfosis surrealista de Nueva York, cuando la cifra de muertos por el coronavirus en Estados Unidos superó el martes la informada por China.
El estado de Nueva York es el epicentro de la epidemia en Estados Unidos, con cerca de 76.000 casos y 1.550 muertos.
Más de tres cuartas partes de los 330 millones de habitantes de Estados Unidos han sido llamados a confinarse para evitar la propagación del virus.
Este martes, el presidente Donald Trump previno a los estadounidenses que las próximas dos semanas serían “muy, muy dolorosas”, ya que el número de casos nuevos de coronavirus continúa aumentando.
“Vamos a pasar por dos semanas muy difíciles”, agregó durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
“Quiero que todos los estadounidenses estén listos para los días difíciles que se avecinan”, expresó en un tono grave, al tiempo que predijo que al final de ese período sería posible “comenzar a ver una verdadera luz al final del túnel”.
Según el recuento de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos se han registrado más de 184.000 casos de contaminación por covid-19 y más de 3.700 muertes.
El número de decesos continúa acelerándose, especialmente en Nueva York, el epicentro estadounidense de la pandemia.
La Casa Blanca estima que la enfermedad matará entre 100.000 y 240.000 personas si se cumplen las restricciones actuales, en comparación con las 1,5 a 2,2 millones de muertes que se producirían si no se toma ninguna medida.
El domingo había mencionado un rango de entre 100.000 y 200.000 fallecimientos.
Ante tan serio panorama, Nueva York está habilitando hospitales de campaña en Central Park o en el estadio que acoge el torneo de tenis US Open.
La capital financiera estadounidense está en una carrera contrarreloj para aumentar dramáticamente la capacidad hospitalaria antes de que los casos alcancen un pico.
Una media docena de carpas, equipadas con 68 camas y 10 respiradores, fueron montadas en el parque de Manhattan. Se espera que acojan a pacientes de covid-19 desde este martes.
“Ves películas como Contagio y crees que están tan lejos de la verdad, que eso nunca sucederá. Así que verlo suceder es muy surreal”, dijo Joanne Dunbar, de 57 años, mientras caminaba por el parque.
Más capacidad hospitalaria
El alcalde Bill de Blasio informó el martes de que la ciudad estaba “triplicando” su capacidad hospitalaria para prepararse para el pico de la pandemia, esperado en siete a 21 días.
“Requeriremos un nivel de capacidad hospitalaria que nunca hemos visto, que nunca concebimos”, declaró al canal televisivo NBC.
Partes de la Gran Manzana están siendo transformadas en anticipación de la ola de pacientes que ya llena los hospitales y agota los equipamientos médicos.
El centro de convenciones Jacob Javits, en el barrio de Hudson Yards de Manhattan, fue transformado en ocho días por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército para acoger casi 3.000 pacientes.
Aceptará a enfermos que no tengan covid-19 para aliviar la carga de los hospitales que se centran en el virus.
A unas cuadras de allí, en el Muelle 90, ancló el lunes el imponente buque hospital USNS Comfort, con mil camas, 12 quirófanos y un personal médico de más de mil personas, también para acoger a pacientes que no tengan el virus.
Otros sitios de la ciudad fueron elegidos como instalaciones médicas temporarias, entre ellos el Centro Nacional de Tenis Billie Jean King en Flushing Meadows-Corona Park, Queens, donde el torneo US Open tiene lugar cada verano boreal.
“La gente en Nueva York está en una situación muy difícil, y lo que están tratando de hacer de manera apropiada es aprovechar las instalaciones que tienen para descomprimir el alza de casos”, declaró a CNN Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas en el equipo del presidente Donald Trump.
"Esperamos, y creo (...) que podríamos empezar a ver un cambio, pero no lo hemos visto aún", añadió.
El gobernador Andrew Cuomo, cuyo hermano menor, Chris, anunció que tenía coronavirus el martes, advirtió a los residentes de Nueva York de que la batalla para derrotar el covid-19 será larga.
“Mídanse a ustedes mismos, midan sus expectativas para no sentirse decepcionados cada día que se despiertan”, manifestó en conferencia de prensa.