París. El director de la agencia de vigilancia nuclear de la ONU se reunirá este sábado con autoridades iraníes en un ambiente de prudente optimismo sobre la inminente conclusión de un acuerdo sobre el programa nuclear con Teherán.
La visita del Director General de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, es considerada crítica para resucitar el acuerdo de 2015.
“Este es un momento crítico, pero un resultado positivo que para todos es posible”, escribió Grossi en Twitter el viernes antes de partir a Irán, donde deberá encontrarse con el jefe de la Organización de Energía Atómica del país.
El acuerdo de 2015, firmado por Irán por un lado y Alemania, China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia del otro, se propone garantizar que Irán no se dote de un arma atómica, aunque la República Islámica siempre negó que esa sea su intención.
Los próximos días son considerados como clave en las negociaciones.
El acuerdo entre Irán y las potencias occidentales para recuperar el pacto sobre el programa nuclear iraní de 2015 está “cerca”, dijo igualmente la jefa de la delegación británica, Stephanie Al-Qaq.
Las firmantes del acuerdo original reanudaron las negociaciones en noviembre pasado en Viena, aunque en esta ocasión Estados Unidos participó de forma indirecta.
Grossi aseguró esta semana que el OIEA “nunca abandonará” sus intentos de lograr que Irán aclare la presencia de material nuclear en varios sitios no declarados.
Camino a Viena
El acuerdo de 2015 brindó a Irán un alivio en las sanciones a cambio de límites estrictos a su programa nuclear.
Sin embargo, se vino abajo cuando Estados Unidos lo abandonó en 2018 bajo el mandato del presidente Donald Trump, quien restableció las sanciones contra Teherán.
Como respuesta, Irán empezó a incumplir gran parte de las restricciones que había aceptado imponer a sus actividades nucleares.
Las potencias occidentales esperan lograr avances en su entendimiento con Teherán, tras constatar que ha acelerado sus avances nucleares.
Sus existencias de uranio enriquecido son actualmente 15 veces superiores al límite fijado en el pacto de 2015, dijo esta semana el OIEA.
Varios observadores creen que los países occidentales podrían abandonar la negociación si no alcanzan un entendimiento el fin de semana.
La Unión Europea ha presidido las negociaciones de Viena y el jefe de política exterior del bloque, Josep Borrell, dijo el viernes que “espera tener resultados el fin de semana” para “resucitar el acuerdo”.
Por su parte, el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, sostuvo el viernes que está preparado para viajar a la capital austriaca si se alcanza un acuerdo.
“Estoy listo para ir a Viena cuando las partes occidentales acepten nuestras condiciones restantes”, expresó en una llamada telefónica con Borrell.
El ministro iraní no definió cuáles eran las condiciones, pero su país ha insistido en el derecho de verificar el levantamiento de sanciones y garantías de que Washington no volverá a retirarse del acuerdo.
La portavoz del departamento de Estado norteamericano, Jalina Porter, aseguró el jueves que el acuerdo está cerca pero que “varios puntos difíciles” continúan sin resolver.