México. Un total de 31 migrantes fueron secuestrados la tarde del sábado pasado en el norte de México mientras viajaban en un autobús con rumbo a una ciudad fronteriza con Estados Unidos, según informó este martes el vocero de Seguridad regional.
“Recibimos el reporte del conductor de un autobús del Grupo Senda, quien señaló que fue interceptado por cinco vehículos conducidos por hombres armados. Estos individuos se llevaron a 31 de los 36 pasajeros”, declaró Jorge Cuéllar a Milenio TV, añadiendo que los secuestrados “son extranjeros”.
El autobús partió de Monterrey, en el vecino estado de Nuevo León, con destino final en la ciudad fronteriza de Matamoros, Tamaulipas, desde donde los migrantes intentan llegar a Estados Unidos. La interceptación ocurrió cerca del municipio de Reynosa, otra ciudad fronteriza.
Los cinco pasajeros que no fueron llevados son de nacionalidad mexicana y, junto con los conductores, fueron escoltados hasta Matamoros, según informó el funcionario.
Cuestionado sobre el tema por periodistas, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, señaló que la búsqueda de los migrantes comenzó el mismo sábado. “Ya se está llevando a cabo la investigación”, afirmó.
Cuéllar indicó que “ya hay avances” en la averiguación, pero agregó que no pueden proporcionar información parcial para evitar afectar la investigación.
Ruta migratoria más peligrosa
La frontera entre Estados Unidos y México fue la “ruta migratoria terrestre más peligrosa del mundo” en 2022, con 686 muertos o desaparecidos, según un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) publicado en septiembre.
Las migraciones hacia Estados Unidos alcanzaron una cifra récord el año pasado. Según la patrulla fronteriza estadounidense, entre octubre de 2022 y setiembre de 2023 se registraron 2,4 millones de ingresos de migrantes por la frontera sur de Estados Unidos, marcando un récord.
El miércoles pasado, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, visitó la Ciudad de México para reunirse con el presidente mexicano y discutir sobre la migración.
López Obrador escribió en X tras la reunión que “se lograron importantes acuerdos”, destacando que “ahora más que nunca es indispensable la política de buena vecindad”, sin proporcionar más detalles.
Con más de 3.000 km de frontera con Estados Unidos, México es un país de tránsito y retención para migrantes extranjeros indocumentados que enfrentan las políticas migratorias restrictivas de Estados Unidos.
Los migrantes extranjeros que cruzan México de sur a norte provienen principalmente de los tres países de América Central afectados por la violencia o la pobreza (Honduras, Guatemala, El Salvador), del Caribe (Haití, Cuba) o de Venezuela.
Miles de ellos quedan varados en la frontera con Estados Unidos, en ciudades como Tijuana, Ciudad Juárez o Matamoros.
En marzo pasado, unos 40 migrantes, en su mayoría venezolanos, murieron en un incendio en un centro de detención del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez.
Los migrantes que atraviesan México también son víctimas de accidentes viales, como el ocurrido en diciembre de 2021 en Chiapas, donde 55 de ellos murieron al estrellarse el tráiler en el que viajaban hacinados.
Asimismo, sufren la violencia de los “coyotes” (traficantes de personas) y de las propias autoridades.
En agosto de 2010, 72 migrantes de distintos países fueron masacrados por el extinto cártel de Los Zetas en San Fernando, estado de Tamaulipas. Otros 17 centroamericanos fueron baleados y calcinados en Camargo, también en el mismo estado, el 21 de enero de 2021, en un hecho por el cual fueron declarados culpables 12 policías.