Nueva York. Irán parece dispuesto a reanudar las negociaciones nucleares aunque por ahora no permitirá el regreso de los inspectores a los que prohibió acceder a sus instalaciones, dijo este jueves el jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, en una entrevista con esta agencia.
Los iraníes “están mostrando señales de voluntad de volver a comprometerse, no sólo con el OIEA, sino también (...) con nuestros antiguos socios en el acuerdo nuclear de 2015″, dijo.
Grossi se reunió esta semana en Nueva York con el canciller iraní, Abbas Araghchi, que desempeñó un papel clave en las negociaciones que culminaron en el histórico acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales, actualmente inactivo.
“Es un momento en el que existe la posibilidad de hacer algo” sobre la cuestión nuclear, dijo Grossi.
“La ventaja que tiene Araghchi es que lo sabe todo sobre este proceso, así que eso nos permite avanzar más rápido”, dijo Grossi en las oficinas del OIEA en Nueva York.
En los últimos años, Teherán ha reducido su cooperación con el OIEA y ha aumentado significativamente su programa nuclear, en particular, con la acumulación de grandes reservas de uranio enriquecido al 60%, no muy lejos del 90% necesario para desarrollar la bomba atómica.
Pero desde la elección en julio del presidente iraní Masoud Pezeshkian, Teherán se ha mostrado dispuesto a reanudar las conversaciones para reactivar el acuerdo nuclear.
El histórico acuerdo -también conocido por sus siglas JCPOA- comenzó a deshacerse en 2018, cuando el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se retiró unilateralmente del mismo y volvió a imponer sanciones. En represalia, Irán intensificó sus actividades nucleares.
“Si las cosas evolucionan de forma positiva, podría ser, y creo que es la intención del presidente (Pezeshkian) y del ministro de Relaciones Exteriores (Abbas Araghchi), que se reanuden las discusiones con los antiguos socios de negociación para ver qué tipo de marco” acuerdan, dijo.
Sin embargo, Teherán no está dispuesto a dar marcha atrás en la decisión que tomó el año pasado de prohibir el acceso a algunos de los “mejores inspectores” del OIEA, según Grossi, una medida que Teherán describió inicialmente como una represalia por los “abusos políticos” de Estados Unidos, Francia, Alemania y Gran Bretaña.
Pero Grossi dice que el marco real del acuerdo quedaría en manos de Irán y las potencias occidentales.
“No van a reincorporar a los inspectores en la lista”, dijo Grossi.
“Quizá haya una revisión de esa postura. Seguiré presionando”, añadió, explicando que tiene previsto visitar Teherán en las “próximas semanas”.
Durante su visita, Grossi planea discutir “diferentes medidas de control y verificación que podríamos acordar antes de un acuerdo más amplio”.
“Creo que llegar a un acuerdo con Irán sobre estas cosas sería una indicación muy constructiva... de cara a una futura negociación”, opinó.
“Si no me permiten establecer una línea de base de todas las capacidades que tiene el país en este momento, entonces ¿qué tipo de confianza están inyectando en el sistema para una negociación con otros socios?”, añadió.
Según una fuente diplomática, la parte europea se muestra escéptica sobre la posibilidad de volver al marco del pacto inicial.
“¿Será el mismo? ¿Se actualizará? ¿Será algo completamente diferente? Eso lo decidirán ellos”, dijo Grossi.