Nueva York y Jerusalén. AFP La Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamó ayer a Israel a cancelar sus planes para construir miles de viviendas para colonos en los territorios palestinos ocupados, al advertir de que estos asestarían “un golpe casi fatal” a las esperanzas de paz.
Jeffrey Feltman, asesor político del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo al Consejo de Seguridad que Israel debe reanudar las transferencias de dinero recaudado por impuestos y tarifas aduaneras –actualmente congeladas– a la Autoridad palestina “sin demora”. El Gobierno israelí bloqueó los fondos en represalia al voto en la ONU que le concedió a Palestina el estatus de Estado observador.
“Instamos al Gobierno israelí a que responda a los llamados internacionales para renunciar a esos proyectos”, mencionó Jeffrey Feltman ante el Consejo de Seguridad.
El asesor político de Ban invitó a los países árabes a respetar por su parte su promesa de suministrar rápidamente “ayuda financiera generosa” a los palestinos para compensar las represalias financieras israelíes.
“La construcción de colonias en Cisjordania, comprendido Jerusalén Este, viola las leyes internacionales (...) y constituye un obstáculo para la paz”, afirmó Feltman.
El Ministerio israelí de la Vivienda publicó ayer las ofertas para 1.048 nuevas viviendas en las colonias de Cisjordania y del Jerusalén Este ocupado y anexionado. El lunes, el ministro del Interior dio luz verde a la construcción de 1.500 viviendas en Ramat Shlomo, también en Jerusalén Este.
En un comunicado, Mark Regev, portavoz del primer ministro, Benjamín Netanyahu, precisó que “la construcción actual concierne a 3.000 viviendas, conforme a la decisión del Gobierno del 20 de noviembre de 2012”.
“Todas estas viviendas se encuentran en Jerusalén en los bloques de colonias que continuarán siendo parte de Israel en todo acuerdo futuro de paz” con los palestinos, agregó.
Ban Ki-moon pidió al Estado hebreo “no continuar por esa vía peligrosa que oscurece las perspectivas de diálogo”.
Todo el Consejo de Seguridad de la ONU, menos Estados Unidos, pidió a Israel que renuncie a sus proyectos de colonias.
En declaraciones separadas, Francia, Gran Bretaña, Portugal y Alemania, y ocho países no alineados (Azerbaiyán, Colombia, Guatemala, India, Marruecos, Pakistán, Sudáfrica y Togo), así como Rusia y China, afirmaron que estas iniciativas son ilegales y amenazan toda posibilidad de relanzar las negociaciones para instaurar dos Estados que coexistan en paz.
Estados Unidos alzó el tono el martes y denunció la “insistencia” de Israel “en seguir este patrón de acción provocativo”.