Katmandú, Nepal. EFE. La guerrilla maoísta de Nepal empezó ayer, dos días después de lo previsto, a dejar sus armas en almacenes bajo la supervisión de Naciones Unidas, como parte del proceso de paz vigente, confirmó Kieran Dwyer, uno de los funcionarios de la ONU encargado de controlar el desarme.
El almacenamiento de las armas comenzó en Chitwan, una localidad situada 80 kilómetros al sur de Katmandú que acoge uno de los siete lugares donde acamparán los combatientes, cuyo arsenal se almacenará en contenedores.
Los contenedores tendrán un solo cierre cuya llave estará en poder de los propios maoístas, tal y como recoge el acuerdo de paz firmado por rebeldes y gobierno en noviembre para acabar con un enfrentamiento de una década.
La guerrilla maoísta se levantó en armas en 1996, en un conflicto que desde entonces ha cobrado la vida de 13.000 personas.
Como parte del acuerdo entre guerrilla y Gobierno, el Ejército nepalí depositará en almacenes una cantidad de armas similar a la que entreguen los maoístas, pero todavía no está claro ni cuándo se producirá este paso.
La entrega de las armas de la guerrilla llega dos días después de que los maoístas se integraran en el nuevo parlamento interino de Nepal, con 73 de los 330 escaños.
Una vez completado el desarme, se espera que los maoístas entren en el gobierno interino, cuya principal misión será organizar unas elecciones, previstas para junio, de las que saldrá la Asamblea Constituyente encargada de decidir si Nepal deja de ser una monarquía y se convierte en una república.
En el Parlamento ahora los maoístas son la segunda fuerza política del país, con el mismo número de escaños que los comunistas de orientación marxista-leninista y solo dos menos que el Partido del Congreso del primer ministro, Girija Prasad Koirala.