Madrid. AFP. La oposición de derecha denunció que el gobierno socialista español está negociando con la organización separatista armada vasca ETA en Oslo, Noruega, pese a que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, lo negó rotundamente.
“La televisión pública noruega, citando fuentes oficiales de su gobierno, ha confirmado que el Gobierno español y ETA están negociando en Oslo a través de mediadores internacionales”, afirmó ayer el secretario general del opositor Partido Popular, Ángel Acebes.
El número dos del PP, que rechaza el denominado proceso de paz abierto desde que ETA anunció un alto el fuego permanente que entró en vigor el 24 de marzo pasado, instó al gobierno socialista a informar al parlamento y a los españoles por qué habla con los terroristas, de qué hablan y por qué lo niegan.
El ministro español de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, uno de los hombres de máxima confianza de Rodríguez Zapatero, negó desde el sábado que se hubiera iniciado algún tipo de acercamientos con ETA en Noruega u otro lugar.
Mentís. “Cuando comiencen los contactos, los primeros que se enterarán serán los partidos políticos”, afirmó Rubalcaba, quien ayer volvió a desmentir las versiones.
“No puedo confirmar lo que no es cierto. No existen tales negociaciones, sostuvo Rubalcaba en rueda de prensa ante la insistencia para que ratificara la noticia.
En su edición del sábado, el diario ABC (derecha) afirmaba que enviados del gobierno y de ETA preparaban en Oslo la negociación con el conocimiento del Gobierno noruego y la mediación del Centro de Diálogo Henri Dunant.
Por si fuera poco, el jefe del gobierno regional vasco, Juan José Ibarretxe, del Partido Nacionalista Vasco (PNV, moderado), insistió ayer en que “el diálogo oficial con ETA existe y está abierto”.
Con cierta picardía, el lehendakari señaló luego que el diálogo existe desde que Zapatero anunció el 30 de junio pasado que abriría contactos con esa organización armada, en un intento por poner fin a la violencia terrorista de ETA, que en casi 40 años mató a más de 800 personas.