Londres. AFP y EFE. Unos 29,8 millones de personas en todo el mundo viven en condición de esclavitud, la mitad aproximadamente en India, según el nuevo Índice mundial de esclavitud, publicado ayer en Londres por una organización no gubernamental australiana.
India es, por mucho, el país con la cifra más alta de esclavos, con casi 14 millones. Sin embargo, el lugar donde el problema es proporcionalmente mayor es Mauritania, porque el 4% de su población vive en régimen de esclavitud, según Walk Free Foundation (WFF).
El primer país latinoamericano en el ranquin es Haití, en segunda posición tras Mauritania. Hay que ir hasta el puesto 65 para encontrar a otro latinoamericano, Perú, al que siguen Surinam (68), Ecuador (69) y Uruguay (72).
Alto riesgo. Los autores señalan que la región centroamericana y del Caribe es “de gran riesgo”, pues es “una zona de tránsito clave para los migrantes económicos que buscan entrar a Estados Unidos”.
“La débil protección de los derechos humanos, la contradictoria aplicación de la ley y la discriminación aumentan el riesgo de esclavitud, con Venezuela, Colombia, Guyana y Honduras mostrando el mayor riesgo.
”Como puerta de entrada de América del Sur y Central a Estados Unidos, México tiene una economía criminal muy desarrollada que se alimenta de los migrantes económicos, a quienes se trafica y esclaviza”, agrega el estudio.
Por su parte, Brasil, aunque tiene 200.000 esclavos, lidera la lucha contra la esclavitud en Latinoamérica. Ocupa el 94 lugar en cuando a número de esclavos en relación con su población y, de acuerdo con el estudio, intenta acabar con esa práctica “reconociendo su existencia y fomentando el debate”.
Los 10 países con mayor predominio de la esclavitud son, por orden: Mauritania, Haití, Pakistán, India, Nepal, Moldavia, Benín, Costa de Marfil, Gambia y Gabón.
En términos absolutos, los países con más esclavos son India (13.956.010), seguida por China (2.949.243), Pakistán (2.127.132), Nigeria (701.032), Etiopía (651.110) y Rusia (516.217).
“A mucha gente le sorprende oír que la esclavitud aún existe”, dijo el director de la organización, Nick Grono. “A la gente se la controla mediante la violencia. Se les engaña o se les fuerza a realizar trabajos, o a colocarse en una situación en la que están explotados y no son libres de irse”, manifestó.