Varsovia. AP y Reuters. Las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han encontrado mucha más resistencia de la esperada en Afganistán, por lo que requieren al menos 2.000 soldados más para combatir la insurgencia, dijo un general.
El general Ray Henault, presidente de la comisión militar de la OTAN, dijo tras un encuentro a puerta cerrada con los jefes militares de la alianza que pediría a su Consejo de manera formal, mañana, que los Estados miembros se comprometan a aportar otros 2.000 ó 2.500 soldados para enfrentar a los revitalizados talibanes.
Afganistán es la misión más compleja que haya emprendido la OTAN. “Nuestra evaluación colectiva es que estamos satisfechos con los avances militares logrados hasta ahora, especialmente en el norte y el oeste, pero menos en el sur, donde ha sido más difícil”, dijo.
La semana pasada, el comandante de la alianza, el general James L. Jones, pidió más soldados y aviones de combate para el sur de Afganistán, donde la OTAN relevó a las tropas encabezadas por Estados Unidos hace un mes.
Sin embargo, sus pedidos podrían ser ignorados por varios miembros de la OTAN, que dicen haber superado sus capacidades.
Henault indicó que solamente el 85% de los soldados y equipos prometidos para la misión se encuentran de hecho en Afganistán.
La solicitud de mañana incluirá un pedido por la cooperación total de las naciones miembro de la OTAN, dijo Henault.
A pesar de lo decidido en la reunión, no hay señales de cuáles naciones de la OTAN estarían dispuestas a sumirse en una situación llena de incómodas similitudes con la crisis en Iraq.
Mientras tanto, ayer fuerzas de la OTAN lucharon contra rebeldes talibanes en los desiertos del sur, en el marco de las fuertes medidas de seguridad implementadas luego de que el viernes un ataque suicida causó la muerte de al menos 16 personas en Kabul.
La OTAN dice que ha matado a más de 300 insurgentes y acorralado a otros cientos desde que lanzó la semana pasada su mayor ofensiva contra los talibanes, pero ellos desmienten las cifras.
“Ha pasado una semana desde el comienzo de la operación y los talibanes están oponiendo una dura resistencia”, dijo su portavoz jefe, Abdul Hai Mutmaen.