SIDNEY (AFP) El papa Benedicto XVI encabezó el domingo una multitudinaria misa al aire libre en Sidney, donde anunció que las próximas Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) se realizarán en Madrid en 2011, tras cerrar las actuales que reunieron a 215.000 peregrinos en Australia.
"Las Jornadas Mundiales de la Juventud 2011 tendrán lugar en Madrid, España", señaló el pontífice, al dar por finalizadas las JMJ en Sidney. El anuncio fue recibido con júbilo por los cerca de 5.000 peregrinos españoles presentes en el evento.
El jefe de los católicos en el mundo, unos 1.100 millones de personas, llegó al lugar de la celebración de la eucaristía la mañana del domingo en un helicóptero, desde donde pudo observar a la alegre multitud, para luego hacer su entrada entre las personas con el "papamóvil".
La misa transcurrió en el estilo litúrgico tradicionalista impuesto por Benedicto XVI, pero también hubo espacio para danzas aborígenes australianas.
Los organizadores tenían previsto en un principio una asistencia de medio millón de personas a la misa, pero el número fue menor. "El hipódromo de Randwick puede albergar a 350.000 personas y está repleto", afirmó el portavoz de las JMJ, Jim Hanna.
Durante la misa, el pontífice señaló que "todos hemos tenido una experiencia inolvidable" esta semana.
El Papa en su homilía volvió a un tema recurrente en sus mensajes durante la semana: los peligros del consumismo en la sociedad actual y la adoración de "falsos ídolos" y "falsas promesas".
"¿Están viviendo sus vidas en una manera que abre espacio para el Espíritu Santo en medio de un mundo que quiere olvidarse de Dios, y hasta rechazarlo en nombre de una libertad mal concebida?", preguntó Benedicto XVI a los jóvenes.
Destacó que se necesita una "nueva era en la que la esperanza nos libere de la superficialidad, apatía y ensimismamiento que insensibilizan nuestras almas y envenenan nuestras relaciones".
También insistió en su condena al aborto: "Una nueva generación de cristianos es llamada a colaborar para crear un mundo en el que la vida, regalo de Dios, sea bienvenida, respetada y apreciada, y no rechazada, temida como una amenaza y destruida".
Cuando expresó a los peregrinos que "la Iglesia necesita su fe, su idealismo y su generosidad, para que pueda ser siempre joven de espíritu", el Papa fue aplaudido por la multitud.
En la eucaristía estuvieron presentes 26 cardenales y 420 obispos, mientras un coro de 300 personas y una orquesta de 80 integrantes se encargaron de los tramos musicales.
Asimismo, fueron confirmados 24 jóvenes, de ellos uno representó a Bolivia, dos más a Uruguay y otro a México y Estados Unidos.
Los peregrinos desafiaron bajas temperaturas y realizaron en el hipódromo de Randwick una vigilia desde la noche del sábado en espera de la eucaristía de este domingo.
Las JMJ se iniciaron el martes en la mayor ciudad australiana, a donde llegaron 125.000 peregrinos extranjeros, 12.000 de ellos latinoamericanos.
El Papa durante su visita de una semana a Australia emitió una histórica disculpa por los casos de abusos sexuales de sacerdotes. "Lamento profundamente el dolor y sufrimiento que han soportado las víctimas, y les aseguro que, como su pastor, comparto su sufrimiento", dijo en una misa el sábado.
En su estadía, encabezó varios actos masivos en el marco de las JMJ. El Papa alemán de 81 años llegó a Australia el domingo pasado, pero hasta el miércoles estuvo en retiro para descansar del largo viaje. Partirá a Roma la mañana del lunes.
Las JMJ fueron creadas en 1986 por Juan Pablo II, y ahora son un evento que cada dos o tres años se celebra en una ciudad distinta para reforzar la fe de los jóvenes católicos.
© 2008 AFP