Roma. AFP y AP. Pese a su grave estado de salud, el papa Juan Pablo II no dejó de tomar decisiones mientras pudo.
"Está gastando su vida y hoy mismo (ayer), sé que ha tomado algunas decisiones referentes a la Iglesia, porqué él quiere seguir cumpliendo con lo que el Señor le encomendó", afirmó el cardenal primado de México, Norberto Rivera, tras oficiar una misa.
Ayer en horas de la mañana, pese a haber sufrido shock séptico e insuficiencia cardíaca, el Pontífice seguía "consciente, lúcido y sereno".
A las 6:00 a. m. concelebró una misa desde su lecho con sus colaboradores más cercanos. También pidió a sus allegados que le leyeran el pasaje bíblico que describe los tramos finales del Vía Crucis, el trayecto de Cristo camino de su crucifixión, y recibió a siete asistentes.
Por otra parte, el Vaticano publicó ayer una lista con las renuncias y los nombramientos de nuevos obispos y nuncios apostólicos, algunos de ellos en América Latina.
Trabajó. Entre las renuncias aceptadas por el papa Juan Pablo II figura la del arzobispo de Managua, el cardenal Miguel Obando y Bravo, quien presentó su renuncia hace cinco años por superar el límite de edad (75 años, como lo establece el Derecho Canónico).
Cerca de otros 18 nombramientos y renuncias fueron aceptados por el Papa, entre ellos la designación del nuevo nuncio en Japón, monseñor Alberto Bottari de Castello, y en Nueva Zelanda, monseñor Charles Daniel Balvo.
El Pontífice también aceptó la renuncia del arzobispo de Resistencia, en Argentina, pero no designó a su sucesor.
El cardenal Rivera agregó que el Papa tomó algunas otras decisiones. Sin embargo, no dio detalles sobre a cuáles se refería. El Papa no puede hablar, manifestó el cardenal, "pero con su actitud, con ese estilo de enfrentar las enfermedades y la misma muerte, nos está diciendo qué estilo de vida debemos llevar. Ese es el gran mensaje de Juan Pablo II".