El 64,1% de los costarricenses opina que tener un arma no debe ser un derecho, reveló el estudio de percepción Tenencia y Portación de Armas elaborada por la firma Enfoques Estudios de Opinión, a solicitud de la Fundación Arias para la Paz.
Se trata de una encuesta aplicada a 1.000 personas, de las siete provincias del país, entre el 6 de abril y el 4 de mayo del 2019.
De acuerdo con el estudio, un 33,4% de la población sí considera que la tenencia de armas debe ser un derecho.
La encuesta, que incluyó diez preguntas, también muestra que poco más del 72% de la gente piensa que el Gobierno sí debe tener la autoridad para decidir quién debe tener un arma y quién no. Casi el 24% opina lo contrario, y el resto no respondió.
El estudio incluyó entrevistas tanto cara a cara como telefónicas, tiene un nivel de confianza del 95% y un margen de error del 3%.
Siempre en el ámbito de la potestad gubernamental sobre quiénes poseen armas, los entrevistados consideraron que es el Estado el que debe definir la cantidad de estas por persona.
De nuevo, un 72% cree que el Gobierno debe determinar esa cifra, frente a un 23%, que se opone.
Justo el pasado 9 de abril, los diputados aprobaron, en primer debate, un proyecto de ley que bajó de tres a dos el número de armas que puede poseer una persona en Costa Rica.
Los legisladores también le dieron luz verde, en segundo debate, a una iniciativa para endurecer las penas de prisión por poseer armas ilegalmente, así como por la portación de pistolas y revólveres permitidos por la ley, pero sin el debido permiso.
Entonces, quien ande un arma no permitida por la la normativa –una ametralladora, por ejemplo– descontará una pena de cárcel de entre cuatro y ocho años.
En tanto, quienes porten un arma legal, pero sin el permiso para ello, se enfrentarán a sanciones de dos a cuatro años.
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El resto de los hallazgos
El sondeo también arrojó que el 6,2% de la población habita en su casa con un arma de fuego.
“Nosotros identificamos que es un porcentaje bastante bajo en referencia a lo que viene siendo la norma en otros países”, afirmó Ana Yancy Espinoza, directora de investigación de la Fundación Arias para la Paz, quien dijo que en otras latitudes la tenencia de armas es de alrededor del 10%.
Según la Dirección General de Armamento del Ministerio de Seguridad Pública, al 2018 había 246.669 armas legales en Costa Rica,
Fue hasta el año 1989 cuando se empezó a ejercer control con respecto a quiénes inscriben esta clase de armamento,
Desde ese año hasta el 2018, 107.882 personas físicas habían registrado un arma a su nombre, frente a 83.053 inscritas por personas jurídicas (empresas). Es decir, que el Estado conoce quiénes son los propietarios de 190.935 de estos dispositivos.
Las 55.734 restantes corresponden a las armas cuyo permiso de portación se otorgó antes de 1989 y, por lo tanto, se desconoce si pertenecen a personas o empresas.
De la población que cuenta con algún armamento de estos en casa, el 75,8% dijo que lo ha utilizado para defenderse, mientras que un 21% dijo no haberlo usado nunca. El 3,2% no respondió.
Entre los resultados del sondeo que más llamaron la atención de los investigadores, fue saber que las personas asocian más la palabra arma con el término peligro (56%) que con el significado de seguridad (36%).
El 0,7% identifica “arma” con ambos conceptos, y el 7,3% se negó a responder.
Como parte del ejercicio para conocer cuáles son las asociaciones que hacen los costarricenses con las armas, la medición consultó a los entrevistados con cuáles propósitos creen que se usan estos armamentos.
Un 62,9% contestó que las armas se emplean para atacar a otras personas, mientras que un 28,8% estimó que estas sirven para defenderse.
El 1,7% opinó que funcionan para ambos fines, y un 6,6% no respondió.
Según Espinoza, la encuesta sirvió, además, para verificar que los costarricenses asocian las armas “más con peligro y con ataque que con defensa y con seguridad”.
“Inclusive en momentos en que podemos hablar de altos niveles de inseguridad ciudadana, todavía el costarricense sigue teniendo el arma de fuego en el rubro de que es un artefacto peligroso”, enfatizó la especialista.
Hasta este jueves 21 de junio, la cifra de homicidios en el país en lo que va del 2019 alcanza las 243 personas.
Por otra parte, en el 2018, 401 homicidios se cometieron con arma de fuego.