Tokio
El presidente estadounidense, Barack Obama, condenó firmemente este sábado el asesinato brutal del ciudadano japonés Haruna Yukawa por el grupo terrorista Estado Islámico, anunciado en un vídeo que las autoridades japonesas aún no pudieron autentificar.
Estas declaraciones, junto a unas palabras similares del primer ministro británico, David Cameron, parecen indicar que los servicios occidentales autentificaron el vídeo que anuncia la ejecución de uno de los dos japoneses secuestrados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Obama, que se dirigía hacia India para una visita oficial, dio el pésame "al pueblo japonés", según un comunicado del ejecutivo estadounidense. "Seguiremos trabajando juntos para llevar a esos asesinos ante la justicia y seguiremos llevando a cabo acciones para debilitar y eliminar al EI", agregó.
El vídeo, de unos tres minutos, muestra una imagen fija del primer rehén, el periodista Kenji Jogo, vestido con un mono naranja, que sujeta la foto de lo que parece ser el cadáver de Haruna Yakuwa (el segundo rehén).
Su autenticidad es objeto de dudas. Según un experto de la cadena pública NHK y otros especialistas, presenta diversas anomalías, como una puesta en escena diferente de lo habitual, la ausencia de logotipo del grupo Estado Islámico y ninguna referencia religiosa.
Rita Katz, directora de SITE, un centro norteamericano especializado en la vigilancia del movimiento yihadista en internet, indicó, sin embargo, que su grupo podía confirmar la autenticidad de la grabación, "debido a sus profundas investigaciones y a su conocimiento de la infraestructura del EI y de otros grupos yihadistas en la red".
La difusión del vídeo se produjo cerca de 36 horas después de que expirara el ultimátum de 72 horas que estableció el martes el EI, que amenazaba con ejecutar a los dos japoneses si no recibía un rescate de 200 millones de dólares.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, denunció el sábado los "actos inadmisibles" de los yihadistas, tras una reunión de emergencia, y prometió una respuesta firme.
"Seguiremos luchando contra el terrorismo, junto a la comunidad internacional", declaró en Tokio, volviendo a pedir la liberación inmediata de los demás rehenes en manos del EI.