Los Ángeles. El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se quejó este jueves ante su par estadounidense Joe Biden de que la soberanía de su país es “a veces” amenazada cuando se trata de la Amazonia, durante la primera reunión entre ambos líderes.
“A veces nos sentimos amenazados en nuestra soberanía en aquella área”, lanzó Bolsonaro durante la declaración a los medios previa a la reunión bilateral celebrada en el marco de la Cumbre de las Américas en Los Ángeles.
“Brasil preserva muy bien su territorio”, insistió el líder de extrema derecha cuyo gobierno es presionado internacionalmente para que emprenda acciones firmes de protección de la región amazónica.
Con sus posiciones a favor de la explotación comercial de la selva amazónica, Bolsonaro es continuamente criticado por ambientalistas y representantes indígenas. Esta semana fue blanco de protestas por Greenpeace y activistas.
Las declaraciones se produjeron antes de que los dos mandatarios sostuviesen una reunión a puerta cerrada en una sala del Centro de Convenciones del centro de Los Ángeles, donde transcurre parte de la agenda de la cita hemisférica.
Biden, en un tono conciliador, dijo que Brasil había hecho “sacrificios verdaderos” en proteger la selva amazónica. “Creo que el resto del mundo debería poder ayudar a Brasil a preservar lo más posible”, agregó el mandatario estadounidense.
En portugués, Bolsonaro se refirió además a las elecciones de su país que se celebrarán en octubre, en momentos en que las encuestas le dan el segundo lugar en el pleito liderado con amplia ventaja por Luiz Inácio Lula da Silva, uno de los políticos más populares de su país y quien gobernó Brasil entre 2003 y 2010.
“Queremos elecciones limpias, auditables”, dijo Bolsonaro, un aliado del expresidente Donald Trump que llegó a colocar en duda los resultados electorales que llevaron a Biden al poder en 2020. “Llegué por la vía democrática y estoy seguro de que cuando salga del gobierno será democráticamente”, agregó.
Biden no habló sobre el tema pero el miércoles su asesor de seguridad, Jake Sullivan, había anticipado que el presidente enfatizaría la importancia de “elecciones libres y democráticas” en la reunión.
Sin apretón de manos, ambos mandatarios posaron para las cámaras sentados en poltronas distantes, y flanqueados por las banderas de sus países. El tono fue cortés pero frío.
Después del encuentro, Bolsonaro dijo que se había sorprendido “positivamente” con Biden. “Creo que tendremos brevemente más encuentros”. Este fue el primero entre ambos.
‘Inauditable’
Más temprano Bolsonaro conversó con periodistas en la entrada de su hotel antes de dirigirse a la reunión de la Cumbre.
A pesar de que Bolsonaro insiste en que la Amazonía es protegida bajo su gestión, insinuó que la desaparición del periodista británico Dom Phillips y el indigenista Bruno Araújo Pereira, que se encontraban trabajando en una remota región de la selva, se debió a la falta de escoltas.
“En aquella región generalmente hay que andar escoltado”, dijo. “Fueron para una aventura, lamentablemente uno espera por lo peor”. En materia electoral también hubo contradicciones.
“¿Tú confías en la elección brasileña?”, le preguntó a una periodista que le respondió que sí. “Felicitaciones entonces”, espetó el mandatario que dijo que el sistema brasileño es “inauditable”, y quien llegó a cuestionar los propios resultados que lo dieron ganador en 2018.
Bolsonaro aterrizó en la ciudad la mañana del jueves. Dijo que sostendría otras cuatro reuniones bilaterales, entre ellas con sus pares de Colombia y Ecuador, pero no ofreció detalles de su agenda.
En sus primeras palabras a los medios reiteró sus críticas a Argentina y Chile, gobernados por los presidentes de izquierda Alberto Fernández y Gabriel Boric.
“Somos esclavos de las elecciones que hacemos”, dijo refiriéndose de forma indirecta al triunfo de ambos mandatarios sin mencionarlos.
El brasileño discursará ante la plenaria el viernes en la mañana, y en la tarde partirá para Orlando para inaugurar un consulado.