Washington. Los abogados del presidente Donald Trump se aprestaban a reanudar este lunes su defensa en el juicio político al que ha sido sometido en el Senado, en coincidencia con explosivas revelaciones contenidas en el manuscrito de un libro de su exasesor de Seguridad Nacional John Bolton.
El hecho aumenta la presión contra los republicanos en la Cámara Alta para que acepten recibir a Bolton como testigo en el juicio contra el mandatario, algo que han reclamado sin éxito los demócratas.
El diario The New York Times informó el domingo de que Bolton escribió que el mandatario le dijo que la ayuda militar a Ucrania estaba sujeta a que Kiev investigara a su potencial rival en las elecciones de noviembre del 2020, Joe Biden.
Los demócratas acusaron a Trump de abuso de poder por haber presionado Ucrania para beneficiarse en la carrera presidencial, y de obstrucción al Congreso, por haber intentado bloquear la investigación.
Trump negó el lunes haber dicho a Bolton que la ayuda militar a Ucrania estaba condicionada a la pesquisa de Kiev sobre sus rivales políticos.
"NUNCA le dije a John Bolton que la ayuda a Ucrania estaba vinculada a las investigaciones de los demócratas, incluidos los Biden. De hecho, nunca se quejó de esto en el momento de su muy pública salida" del gobierno, tuiteó Trump en las primeras horas del lunes.
"Si John Bolton dijo esto, fue solo para vender un libro".
El senador republicano Mitt Romney indicó a la prensa que "es cada vez más aparente que sería importante escuchar a John Bolton". "Creo que es cada vez más probable que otros republicanos se unan a quienes pensamos que deberíamos escuchar a John Bolton", remarcó.
Los republicanos tienen 53 de las 100 bancas en el Senado y son necesarios 67 votos -una mayoría de dos tercios- para destituir a Trump, pero solo se precisa una mayoría simple -lo que implicaría al menos cuatro votos republicanos- para dar luz verde al testimonio de Bolton y de otros altos funcionarios solicitados por los demócratas.
Citando el manuscrito inédito de Bolton, el Times escribió que Trump le manifestó a Bolton que quería mantener congelados $391 millones en ayuda a Ucrania hasta que los funcionarios de Kiev ayudaran con una investigación sobre Biden y su hijo Hunter, quien integró el directorio de una empresa de gas ucraniana.
“No he visto el manuscrito”, afirmó más tarde Trump a los periodistas sobre el texto de Bolton que fue enviado a la Casa Blanca para obtener una autorización de seguridad.
Defensa del mandatario
Los alegatos de la defensa del presidente comenzaron esta tarde con una revisión de Ken Starr, quien lideró la investigación del impeachment contra Bill Clinton en 1998, sobre procesos de destitución del pasado.
Starr argumentó que este esfuerzo por expulsar a Trump de la Casa Blanca era inconstitucional porque, a diferencia de los casos de los presidentes Richard Nixon y Clinton, los artículos de acusación no representan un delito real.
Agregó que tanto en el caso de Nixon como en el de Clinton existía una acuerdo bipartidista entre republicanos y demócratas para destituir al presidente. Clinton fue absuelto y Nixon renunció a la presidencia en 1974 antes de ser sometido a juicio.
“El impeachment debe ser bipartidista por naturaleza”, argumentó, y parafraseó a los abogados de la Casa Blanca cuando dijeron que compete a los votantes, no al Congreso, decidir en las elecciones de noviembre si debe continuar o no en el gobierno.
La aparición de Starr despertó comentarios ácidos de la senadora Claire McCaskill, entre otros.
“Me estoy rascando la cabeza aquí”, expresó McCaskill. “Traen al abogado que creyó que una infidelidad era un asunto para un impeachment para que argumente que la retención de ayuda militar urgente para un aliado que está en guerra con nuestro enemigo a cambio de un favor político no lo es”.
“Si no fuera tan exasperante sería muy gracioso”, añadió.
En el inicio del alegato de la defensa el sábado, el abogado de la Casa Blanca Pat Cipollone aseguró que Trump “no ha hecho absolutamente nada malo”.
Según la defensa, la retención de la ayuda no estuvo vinculada al pedido de investigación de Biden, algo que las revelaciones del manuscrito de Bolton contradicen.
La semana pasada, los acusadores de la Cámara de Representantes presentaron su alegato contra el mandatario, en el que detallaron cómo Trump retuvo la ayuda militar y sostuvo una reunión en la Casa Blanca para presionar a Kiev para que iniciara una investigación sobre los Biden.
Los demócratas aprovecharon rápidamente el informe para reiterar las demandas para que Bolton y otros altos funcionarios de la administración Trump sean llamados a testificar en el juicio de destitución contra el presidente.
La presidente demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, afirmó que la negativa de la mayoría republicana del Senado a escuchar el testimonio de Bolton y otros testigos es “ahora incluso más indefendible”.