Washington. En 2020, Joe Biden prometió ser un candidato de un solo mandato. Sin embargo, una vez en la presidencia, cambió de opinión hasta que la preocupación por su edad le obligó a cumplir su promesa.
Promesa inicial de un ‘candidato de transición’
9 de marzo de 2020.
Biden enfrentó críticas por su edad cuando hizo campaña por la Casa Blanca a los 77 años.
En un acto de recaudación de fondos, el demócrata se describió como un “candidato de transición”. “Hay toda una generación de líderes que viene detrás de mí. Son el futuro de este país”, afirmó. Estas palabras se interpretaron como un compromiso solemne del candidato a ser presidente durante un solo mandato.
El 20 de enero de 2021, en las escalinatas del Capitolio, aún conmocionado por el ataque de los partidarios de Donald Trump, Biden se convirtió en el presidente estadounidense más viejo en jurar su cargo.
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Resistencia demócrata a mitad de mandato
Durante los primeros 18 meses de su presidencia, Joe Biden impulsó varios proyectos de inversión para el clima y las infraestructuras estadounidenses.
Reiteró constantemente que Donald Trump representaba un peligro para la democracia.
A pesar de estos esfuerzos, su nivel de aprobación se desplomó y las encuestas le pronosticaron una derrota monumental en las elecciones legislativas de mitad de mandato.
No obstante, los demócratas conservaron el control del Senado y asestaron un golpe al Partido Republicano, que estaba bajo el control de Donald Trump. Este último anunció entonces que volvería a ser candidato a la Casa Blanca.
En consecuencia, tanto los demócratas más progresistas como los moderados vieron a Joe Biden como la mejor opción para la victoria.
En una convención en Filadelfia, en febrero de 2023, los demócratas recibieron a Joe Biden en el escenario con gritos de “¡Cuatro años más! ¡Cuatro años más!”. Su candidatura se daba ya por sentada.
Anuncio de reelección para ‘terminar el trabajo’
La hizo oficial el 25 de abril de 2023. En un tuit publicado alrededor de las 6:00 a. m. Joe Biden anunció que se presenta “a la reelección”. Enfatizó la lucha por la libertad y la democracia, que, según él, aún continúa.
“Terminemos el trabajo”, dijo, al elegir nuevamente a su vicepresidenta Kamala Harris como compañera de fórmula.
Sin embargo, la campaña de Joe Biden transcurría con lentitud, interrumpida por los numerosos fines de semana en su casa de Delaware, en el este de Estados Unidos.
Los vídeos del demócrata tropezando, tartamudeando y demacrado se propagaron por las redes sociales, para regocijo de los republicanos, que lo acusaron de estar senil.
Cuestionamientos por deficiente desempeño en el debate
Jueves 27 de junio de 2024, 9:00 p. m. El presidente estadounidense y su predecesor republicano se enfrentaron en CNN en su primer debate de la campaña.
En el escenario, el líder demócrata pareció confuso, se trabó al hablar y lo hizo sin brío, mientras Donald Trump contaba una mentira tras otra con aplomo.
Nada más terminar el debate, un torrente de mensajes de pánico de demócratas anónimos se extendió por la prensa.
Pedían al presidente, al que consideraban demasiado mayor, que dimitiera para evitar una derrota contra los republicanos en noviembre.
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En un mitin en Carolina del Norte, Joe Biden aseguró que puede “hacer el trabajo”, pero las dudas hicieron mella entre los ricos donantes del Partido Demócrata: ¿Y si el presidente no está en condiciones de dirigir el país durante los próximos cuatro años?
La líder demócrata Nancy Pelosi, expresidenta de la Cámara de Representantes y todavía muy influyente en el partido, consideró “legítimo” cuestionar el estado de salud de Joe Biden.
Poco después, un primer congresista demócrata pidió al presidente que abandonara su candidatura a un segundo mandato.
Un segundo congresista siguió su ejemplo 24 horas después, y otros expresaron por primera vez públicamente sus reservas sobre la edad de Biden.
Estos llamamientos se silenciaron durante un tiempo tras el intento de asesinato de Donald Trump el 13 de julio.
Pero fueron más de treinta en total, progresistas y moderados por igual, los que le pidieron que tirara la toalla. Hasta la fatídica declaración de Joe Biden este domingo.