Washington. El control del Congreso de Estados Unidos estará dividido el próximo año tras las elecciones intermedias en las que la oposición demócrata recuperó la Cámara de Representantes y el Partido Republicano, del presidente Trump, mantuvo la mayoría en el Senado, proyectaron medios este martes.

Los demócratas obtendrán los 23 escaños necesarios para tener la mayoría en la Cámara de Representantes, al derrotar a los republicanos en estados clave como Virginia, Florida, Pensilvania y Colorado, informaron Fox y NBC.

Sin embargo, los republicanos contraatacaron en el Senado, donde le ganaron al menos dos demócratas, en Indiana y Dakota del Norte, y retuvieron dos escaños en riesgo en Tenesí y Texas.

Los avances demócratas incluyeron varios distritos suburbanos que Hillary Clinton ganó durante la contienda presidencial del 2016.

En Miami, la exintegrante del gabinete durante el gobierno del presidente Bill Clinton, Donna Shalala, ganó un escaño desocupado, mientras que el representante republicano Carlos Curbelo perdió en su intento por un tercer periodo en otro distrito de Florida.

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En los suburbios de la capital del país, la representante de Virginia Barbara Comstock, quien era una de las republicanas en mayor riesgo de ceder su escaño, perdió ante Jennifer Wexton, fiscala y legisladora estatal que era una de varias mujeres que llenaron las boletas en números sin precedentes.

Mientras que en Kansas, la demócrata Sharice Davids desbancó al titular republicano para convertirse en la primera mujer indígena y homosexual en ser elegida a la Cámara Baja.

Asimismo, Ilhan Omar y Rashida Tlaib se convirtieron en las dos primeras mujeres musulmanas en resultar electas al Congreso de Estados Unidos.

Ambas demócratas, de Minnesota y Míchigan respectivamente, fueron electas a la Cámara de Representantes. “Lo logramos, juntos. ¡Gracias!”, tuiteó Ilhan Omar, una refugiada somalí.

Sin embargo, en Kentucky, una de las principales aspirantes demócratas, la expiloto de combate de la Marina Amy McGrath perdió en su intento por desbancar al republicano de tres periodos Andy Barr en el distrito del área de Lexington.

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Republicanos en el Senado

Los republicanos retuvieron el control del Senado al desbancar a demócratas en Indiana y Dakota del Norte para garantizar que permanecerán como los guardianes de la agenda conservadora del presidente Donald Trump por dos años más.

A pesar del efecto divisivo de Trump entre los votantes, el Partido Republicano aprovechó su enorme popularidad entre los electores de derecha en los estados rurales.

Los republicanos se abrieron paso a la victoria derrotando a los demócratas Joe Donnelly en Indiana y Heidi Heitkamp de Dakota del Norte. También conservaron escaños fuertemente disputados en Texas, en donde el senador Ted Cruz logró derrotar al representante Beto O’Rourke, un liberal con excelente financiamiento.