Washington.
El presidente estadounidense, Donald Trump, defendió ayer su dura política migratoria, reiterando también en su primer discurso ante el Congreso su voluntad de impulsar una reforma fiscal "histórica" y reemplazar el sistema de salud.
Presionado por dar claridad de acción a la Casa Blanca luego de un caótico primer mes de gobierno, el mandatario empezó su discurso poco después de las 8 p. m. (hora en Costa Rica) desde el hemiciclo de la Cámara de Representantes del Capitolio, frente a sus ministros, senadores, congresistas y algunos magistrados de la Corte Suprema.
Una semana después de ampliar las facultades de las agencias inmigratorias y dejar vulnerables de deportaciones a casi todos los 11 millones de indocumentados que viven en el país, Trump prometió mano dura en las fronteras.
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"Al hacer que finalmente se apliquen nuestras leyes migratorias, vamos a elevar salarios, ayudar a los desempleados, ahorrar miles de millones de dólares y tornar nuestras comunidades más seguras para todos", dijo.
Además, defendió la adopción de un nuevo sistema migratorio basado en méritos y en la capacitación de los candidatos, garantizando que los extranjeros no generen costos para el Estado.
En la visión del presidente, una reforma "real y positiva" del sistema migratorio estadounidense es posible si todos se ponen de acuerdo sobre tres puntos básicos: mejorar salarios para los estadounidenses, fortalecer la seguridad nacional y "restablecer el respeto por nuestras leyes".
Y prometió el "pronto" inicio de la construcción del polémico muro en la frontera con México, con el objetivo de frenar "las drogas y el crimen".
De traje oscuro y corbata azul rayada –abandonando su característico rojo y sus explosivos alegatos improvisados–, el mandatario se mantuvo a grandes rasgos en línea con el discurso preparado para la ocasión solemne.
Frialdad demócrata
Contra la tradición, los demócratas reservaron una recepción fría al presidente a su entrada al hemiciclo, la mayoría se quedó de pie pero sin aplaudir, mientras que los republicanos aplaudieron con mucha fuerza.
En señal de protesta silenciosa, unas 40 congresistas demócratas lucían de blanco, color símbolo de la lucha por los derechos de las mujeres.
Casi 40 días después de su investidura, Trump dibujó a los legisladores las prioridades de la Casa Blanca, intentando alejarse de las polémicas que arrastra su joven gobierno y haciendo un llamado a la unidad en un país cada vez más polarizado.
"Un nuevo capítulo de la grandeza de Estados Unidos está empezando. Un nuevo orgullo nacional está barriendo el país. Ya empezamos a drenar el pantano de la corrupción", manifestó el mandatario.
Trump prometió "reiniciar el motor de la economía estadounidense" y hacer más difícil que las empresas muden su producción al exterior.
"Mi equipo económico está desarrollando una reforma fiscal histórica que reducirá la tasa de impuestos de nuestras empresas para que puedan competir y triunfar donde sea", dijo.
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El presidente insistió en una de sus más polémicas promesas de campaña, llamando a los legisladores "a rechazar y sustituir" el "desastre" de Obamacare, el sistema de salud heredado de su antecesor Barack Obama.
El asunto es delicado: el desmantelamiento del sistema de salud pública Obamacare podría dejar unos 20 millones de personas sin cobertura médica, un escenario que atormenta a congresistas republicanos.
Política exterior
Fuera de Estados Unidos, Trump declaró el "fuerte apoyo" hacia la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), aunque llamó a los países aliados a cumplir sus compromisos financieros.
"Apoyamos a la OTAN, una alianza forjada por los lazos de dos guerras mundiales que destronaron el fascismo y una Guerra Fría que derrotó el comunismo. Pero nuestros socios deben cumplir sus obligaciones financieras", aseguró.
Asimismo, prometió "demoler" al grupo Estado Islámico con la ayuda de "nuestros aliados en el mundo musulmán".
La Casa Blanca anunció el lunes que Trump propone un aumento de 10% al presupuesto militar de Estados Unidos, que en $615.000 millones es ya el mayor del mundo.
Esa propuesta obligaría necesariamente a un recorte en otras áreas como protección ambiental y los planes de ayuda internacional.
Inofrmación actualizada a las 9:55 p. m.