Washington. La última inculpación del expresidente republicano Donald Trump preludia una mezcla potencialmente explosiva de drama judicial y caos de campaña para las presidenciales de 2024.
Por el momento es muy difícil anticipar qué pasará el próximo año tanto en el frente legal como en el político, pero lo cierto es que Trump, de 77 años, se juega mucho en los próximos meses.
Quizá otra inculpación
Trump se enfrenta a tres inculpaciones penales hasta el momento y se avecina una cuarta.
Es probable que se le acuse de haber intentado alterar el resultado de las elecciones de 2020 en el estado de Georgia (sur).
La investigación se abrió a raíz de una llamada telefónica de Trump el 2 de enero de 2021 a funcionarios electorales de Georgia, a quienes presionó para que "encontraran" 11.780 votos para evitar su derrota contra el demócrata Joe Biden en este estado.
Los juicios
Está previsto que Trump vaya a juicio en Nueva York en marzo por pagos secretos realizados a una actriz porno en vísperas de las elecciones de 2016.
Sin embargo, el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, dijo que estaría dispuesto a cambiar la fecha para acomodar los dos procesamientos federales, aunque la decisión final depende en última instancia del juez que lleva el caso.
Trump será procesado en Florida en mayo por negligencia en el manejo de documentos gubernamentales confidenciales tras irse de la Casa Blanca.
Pero el caso mucho más grave es el tercero.
El fiscal especial Jack Smith le acusa de conspirar para alterar el resultado de las elecciones de 2020.
La fecha del juicio, que se celebrará en Washington, se fijará en una vista el 28 de agosto ante la jueza del Tribunal de Distrito Tanya Chutkan.
Los abogados de Trump intentarán retrasar el juicio por conspiración tanto como sea posible, en lo ideal hasta después de las elecciones de noviembre de 2024.
Ty Cobb, quien fue asesor especial de la Casa Blanca bajo Trump pero se ha vuelto muy crítico con el expresidente, declaró a CNN que es poco probable que se retrase.
Chutkan intentará que avance "rápidamente" pero al mismo tiempo se garanticen los derechos de Trump, dijo Cobb.
"Creo que este caso podría llegar a juicio poco después del primero del año y no me sorprendería ver que es el primero en la lista", dijo Cobb, que estima que los fiscales necesitaran "entre cuatro y seis semanas para presentar su caso".
El juicio
Trump considera que los cargos presentados contra él son un intento de Biden, su probable contrincante en las presidenciales de 2024, de paralizar su campaña a la Casa Blanca.
"Mi opositor político me ha golpeado con un aluvión de juicios débiles (...) que consumen gran cantidad de mi tiempo y dinero", escribió en su plataforma Truth Social. "Es interferencia electoral, y la Corte Suprema debe interceder".
Hasta ahora la miríada de problemas legales de Trump no parece haber hecho mella en su sólido apoyo entre los votantes republicanos a su candidatura a la nominación presidencial para 2024.
Trump supera a su rival más cercano, el gobernador de Florida Ron DeSantis, por un 54% frente a un 17% en una encuesta reciente del New York Times/Siena College.
Las asambleas del partido y las primarias para seleccionar al candidato republicano para las elecciones de 2024 comenzarán en enero y la convención nacional de la formación para la nominación se llevará a cabo del 15 al 18 de julio en Milwaukee, Wisconsin.
Los diversos juicios penales podrían hacer que Trump pase tanto tiempo en los tribunales como en la campaña electoral, o incluso más.
"Realmente nunca hemos visto a un contrincante principal de un partido político importante intentar hacer campaña bajo múltiples acusaciones, así que en realidad no sabemos en qué dará todo esto", explicó Steven Schwinn, profesor de derecho de la Universidad de Illinois Chicago.
Daniel Richman, un exfiscal federal que imparte clases en la Universidad de Columbia, añade que la ley exige que el acusado asista al juicio pero "queda por ver si los tribunales harán una excepción porque el tema es que se presenta para presidente", dijo.
Carl Tobias, profesor de derecho de la universidad de Richmond, cree que los jueces que presiden los juicios de Trump tratarán "de acomodar su horario si hace solicitudes razonables para ausentarse".
Trump puede seguir en la carrera por la Casa Blanca aunque haya sido condenado en uno o más de los casos penales porque la Constitución no impide que un delincuente aspire a la presidencia.