Washington
Donald Trump ha arremetido contra el presidente, el Partido Demócrata y sus contrincantes republicanos en la contienda rumbo a la Casa Blanca, así como contra los inmigrantes de México, los chinos y el senador John McCain porque fue prisionero de guerra.
Esa lista de personas a las que Trump critica aumenta velozmente e incluye ahora a la conductora Megyn Kelly de Fox News Channel.
El Partido Republicano ha lidiado por mucho tiempo con la percepción del público de que libra una "guerra contra las mujeres" y ha tenido dificultades para convencer a un número mayor de ellas que está de su lado.
El domingo, durante sus presentaciones en programas matutinos de entrevista, Trump insistió: "Yo valoro a las mujeres".
Sin embargo, Kelly, de 44 años, es la persona indicada para enfurecer al magnate de carácter extrovertido y combativo.
A Kelly se le reconoce como una persona triunfadora, dominante y muy inteligente, y tal como lo mostró en el debate republicano del jueves, una mujer más que dispuesta a resistir al multimillonario de 69 años.
La postura de Trump sobre las mujeres quizá queda manifiesta con su orgullosa propiedad de concursos de belleza y cuando dijo en broma hace una década en un programa de televisión que si no fuera el padre invitaría a salir a su propia hija, que tenía entonces 24 años y fue modelo de adolescente.
El referirse a su reciente controversia con Trump, Kelly dijo en una entrevista transmitida el domingo que "ya se le pasará, estoy segura. Estaremos bien. Y también Estados Unidos".
Sin embargo, la presentación de Kelly en el programa "Media Buzz" de Fox News Channel fue grabada el viernes, antes de la declaración de Trump de que "(a ella) le salía sangre de todas partes".
Esa afirmación le costó a Trump una invitación a la conferencia RedState Gathering de Atlanta, donde varios aspirantes hablaron a un millar de activistas conservadores.
Erick Erickson, presentador de RedState, dijo en una declaración que Trump violó las normas básicas de decencia.
La campaña de Trump respondió calificando a Erickson de "perdedor total" que respalda a otros "perdedores del sistema".
Jeb Bush, el favorito para muchos donantes republicanos, dijo en RedState que las afirmaciones de Trump perjudicarán las posibilidades republicanas con las votantes, que ya se inclinan por los demócratas en las elecciones presidenciales. "¿Queremos ganar? ¿Queremos insultar al 53% de nuestros votantes?", preguntó el exgobernador de la Florida.
Trump replicó el domingo por CBS que es Bush quien tiene problemas con las mujeres, debido a un comentario que Bush formuló la semana pasada cuando debatía la posibilidad de cortar fondos para la organización Planned Parenthood.
"No estoy seguro de que necesitemos 500 millones de dólares para cuestiones de salud femenina", afirmó Bush en esa ocasión. Más adelante emitió una aclaración en la que dijo que se había equivocado. "Creo que tiene un gran problema", dijo Trump. Afirmó que era peor que una videograbación de Mitt Romney, candidato republicano en 2012, en el que este dijo que el 47% de los votantes dependían del gobierno y que votarían por el presidente Barack Obama de cualquier manera.
Entre los asistentes a RedState había opiniones divergentes sobre si Trump debería ser criticado por sus comentarios sobre Kelly, pero si había un consenso, apuntaba a que los activistas siguen interesados en las opiniones de Trump y esperan que otros candidatos presten atención a su auge.
"Parece que los republicanos quieren elegir a alguien como el candidato", comentó Jane Sacco, de New Port Richey, Florida, que se mostró enojada por la decisión de Erickson de desinvitar a Trump. "Y quieren que todo el mundo obedezca".
Muchos otros candidatos arremetieron también contra Trump. Carly Fiorina, ex directora general de Hewlett-Packard, única mujer aspirante a la candidatura presidencial republicana, no escatimó su opinión. "Creo que las mujeres de todo tipo están horrorizadas con esto", dijo a CBS y afirmó que había una diferencia entre ser políticamente incorrecto y "lanzar insultos a toda clase de gente".
También sugirió que la reacción de Trump indica que carece de paciencia. "Si le resulta insoportable una pregunta, imaginen la presión que enfrentaría estando en el despacho presidencial", sentenció.
Mike Huckabee, exgobernador de Arkansas, parecía exasperado por la situación y en un momento dado replicó a los periodistas que le hacían preguntas relacionadas con Trump: "Me presento a la presidencia" , dijo. "No me presento a crítico de medios sociales de otra persona que se presenta a la presidencia".
Un exasesor de campaña de Trump insinuó que la carrera del empresario a la Casa Blanca se ha convertido en un espectáculo paralelo a las primarias.
El sábado por la noche, la campaña de Trump anunció el despido de uno de sus principales asesores.
Roger Stone respondió en Twitter que él había "despedido a Trump", y no al revés.
Según un correo al que tuvo acceso The Associated Press, Stone escribió al candidato: "Las actuales controversias relacionadas con personalidades y provocadoras peleas mediáticas han alcanzado tal nivel que han distraído la atención de su plataforma y sobrepasado su mensaje central". El director de campaña de Trump dijo no haber recibido ese mensaje.