Quito. Los candidatos a la presidencia de Ecuador cerraron este jueves los actos de campaña, en un jornada marcada por el homenaje al aspirante asesinado por un sicario y la denuncia de un supuesto atentado a tiros por parte de otro de ellos.
Con chaleco antibalas y casco, el periodista Christian Zurita encabezó los homenajes en Quito a su amigo Fernando Villavicencio, ultimado por un pistolero colombiano el 9 de agosto.
Zurita, quien reemplazó a Villavicencio en la formula presidencial del partido centrista Construye, participó en una misa católica ante cientos de seguidores vestidos con camisetas blancas.
Rodeados de fotografías de Villavicencio y de policías fuertemente armados, los simpatizantes llevaron rosas, soltaron globos blancos y cantaron en memoria del experiodista.
Algunos asistentes lloraron en el primer acto público de Zurita, que desde el domingo, cuando fue presentado como candidato, había preferido alejarse de las aglomeraciones debido a los riesgos de seguridad.
Atentado en verificación
Desde la localidad de Durán (suroeste), el candidato de derecha Daniel Noboa denunció un atentado contra su caravana.
"Gracias a Dios salimos ilesos. El amedrentamiento y el miedo no tienen cabida en el país que queremos y por el que estamos comprometidos a cambiar de una vez por todas", escribió en la red social X, antes llamada Twitter.
La policía y el ministerio del Interior contradijeron esa versión e investigan si se trató de un cruce de disparos entre delincuentes.
Un integrante del equipo de campaña comentó que personas abrieron fuego ante el paso de sus automóviles.
La izquierdista Luisa González, favorita en las encuestas, visitó Guayaquil (suroeste) para convencer a los votantes que le ayuden a conseguir la presidencia en la primera vuelta, la gran ambición de su padrino político, el exmandatario Rafael Correa (2007-2017).
Ese puerto también fue escenario de los últimos eventos ante partidarios del exvicepresidente de derecha Otto Sonnenholzner (2018-2020). En Quito, el izquierdista Yaku Pérez hizo un recorrido usando un chaleco antibalas, una imagen inusual del líder indígena que por segunda vez se lanza a la presidencia.
Crimen trasnacional
Mas temprano, Zurita dijo sospechar que el crimen trasnacional está detrás del asesinato de Villavicencio. El sicario que le disparó murió en un tiroteo contra los guardaespaldas y otros seis colombianos están detenidos.
El nuevo aspirante presidencial intuye que sus propuestas para acabar con el negocio y las rutas de los narcos que operan con pandillas motivaron el homicidio.
"Yo estoy casi seguro que él fue asesinado porque él dijo que militarizaría los puertos y eso lo vamos a mantener como principio", dijo Zurita el jueves en un encuentro con medios internacionales.
Antes de su muerte, Villavicencio denunció que fue amenazado por alias Fito, líder de "Los Choneros", una pandilla que ha sido relacionada con disidentes de las guerrilla colombiana FARC y el cartel mexicano de Sinaloa.
Bendición
Zurita fue un aliado de Villavicencio cuando como periodistas destaparon casos de corrupción durante el mandato de Correa.
En una de sus investigaciones revelaron que Correa había pactado con empresarios el apoyo económico para sus campañas a cambio de entregarles contratos estatales.
El exmandatario, que niega estas acusaciones y vive exiliado en Bélgica, fue condenado en ausencia a ocho años de cárcel.
También puso contra las cuerdas al delfín de Correa, Lenín Moreno (2017-2021), por una presunta red de corrupción en una hidroeléctrica, en un caso que no ha sido juzgado.
Otra de sus investigaciones traspasó fronteras, cuando involucró a la exsenadora colombiana Piedad Córdoba, amiga de Correa, con Alex Saab, presunto testaferro del chavismo venezolano recluido en Estados Unidos.
Por su cercanía con Villavicencio, Zurita se consideró a sí mismo un sucesor idóneo para tomar sus banderas.
"No haberlo hecho (reemplazarlo), hubiese sido una traición a su lucha, una traición a su nombre", dijo.
La madre de Villavicencio, Gloria Valencia, le dio su bendición: "Christian Zurita es el único que puede reemplazar a mi hijo", dijo al diario El Universo.
Antes de su muerte, Villavicencio era segundo en la intención de voto (12,5%), según la firma Cedatos. González lideraba esa encuesta (24%), una de las varias que existen en el país.