Teherán. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), cuyo director general se encuentra en Teherán, anunció que se alcanzó un acuerdo con Irán sobre el monitoreo de su programa nuclear.
Este acuerdo, dado a conocer este domingo, llega tan solo días después de que se denunciara la falta de cooperación iraní al respecto.
Rafael Grossi viajó a la capital de Irán para intentar apaciguar las tensiones entre Occidente e Irán y destacó que el acuerdo alcanzado servirá para “dar tiempo a la diplomacia”.
El jerarca de la agencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) se reunió con el director de la Organización de Energía Atómica local y vicepresidente del país, Mohamad Eslami.
En un comunicado común, ambos responsables anunciaron que “los inspectores del OIEA cuentan con la autorización para intervenir en el mantenimiento de los equipamientos, así como para reemplazar los discos duros” de las cámaras instaladas en las infraestructuras iraníes por el gendarme nuclear de la ONU.
“Dentro de unos días” los inspectores del organismo de la ONU podrán acceder al material de vigilancia de los distintos emplazamientos iraníes y asegurarse de que funcionan correctamente, tras varios meses de incertidumbre, explicó.
Grossi realiza su segunda visita a Irán en este año y afirmó con este nuevo compromiso la continuidad de la vigilancia y control del programa nuclear iraní, que también ofrece un mayor lapso a las grandes potencias que intentan resucitar el acuerdo alcanzado en Viena en 2015.
“Las conversaciones han sido francas” y “se ha restablecido la comunicación”, destacó el director del OIEA.
Restricciones desde febrero
Irán restringió desde febrero pasado el acceso de los inspectores del OIEA a algunas de sus instalaciones nucleares y se negaba a proporcionar las filmaciones en tiempo real de cámaras y datos de otras herramientas de vigilancia que la agencia de la ONU había colocado allí.
Se había logrado negociar un compromiso que aseguraba cierto grado de supervisión, pero este expiró en junio y al OIEA le preocupaba perder datos si se producía la saturación de la capacidad de registro de estos útiles.
“Desde febrero del 2021, tanto las actividades de verificación como las de vigilancia se han visto seriamente obstaculizadas por la decisión de Irán” de restringir las inspecciones, denunció el martes pasado el OIEA en un informe que fue consultado por la AFP.
En virtud de este nuevo acuerdo, el OIEA aún no tendrá acceso a los datos de las cámaras, pero Irán se había comprometido en febrero a proporcionarlos si las conversaciones para salvar al acuerdo de Viena tenían éxito.
Citado por la agencia de prensa oficial Irna, Eslami se congratuló por “las buenas y constructivas negociaciones con Grossi”.
”Se decidió que los expertos del Organismo vendrán a Irán para reemplazar las tarjetas de memoria de las cámaras de vigilancia técnica. Permanecen selladas en Irán y se instalarán otras nuevas tarjetas”, destacó.
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Valoraciones mundiales
Rusia valoró positivamente el acercamiento entre el OIEA e Irán.
"Nos felicitamos por los resultados de la visita de Grossi a Teherán. Pedimos que se reanuden lo antes posible las negociaciones en Viena", aseguró en Twitter el embajador ruso en la capital austríaca, Mijail Ulianov.
El diplomático de la Unión Europea (UE) encargado de seguir las negociaciones de Viena, Enrique Mora, también se felicitó por “esta etapa positiva” y pidió retomar las conversaciones “lo más rápido posible”.
Grossi volverá a Teherán "en un futuro próximo para mantener consultas a alto nivel", señala el comunicado conjunto, que insiste en "la cooperación recíproca y la confianza entre ambas partes".
Esta visita además tuvo lugar precisamente antes de una reunión, el lunes, del Consejo de gobernadores del OIEA, a la que Irán "decidió asistir" para "continuar nuestras discusiones", subrayó Eslami.
El asunto de las cámaras de vigilancia del OIEA se inscribe dentro de unas negociaciones más amplias para tratar de salvar este acuerdo concluido en Viena y que saltó por los aires en 2018, cuando el expresidente estadounidense Donald Trump se salió de él y restableció las sanciones de Washington. En respuesta, Irán renunció a aplicar la mayoría de sus compromisos.
El acuerdo ofrece a Teherán un aligeramiento de las sanciones occidentales y de la ONU a cambio de que se comprometa a no dotarse nunca de armas atómicas y que reduzca drásticamente su programa nuclear, bajo estricto control de las Naciones Unidas.
Las negociaciones comenzadas en abril para intentar resucitar el acuerdo, reintegrando a Washington, quedaron suspendidas el 20 de junio, dos días después de la victoria presidencial en Irán del ultraconservador Ebrahim Raisi.
Tras la publicación del informe del OIEA, Raisi aseguró el miércoles que su país está demostrando “transparencia”.
”Naturalmente, en caso de un enfoque poco constructivo por parte del OIEA, no es razonable esperar una respuesta constructiva de Irán”, matizó.
En reacción al informe del OIEA el secretario de Estado, Antony Blinken, advirtió que Estados Unidos está “cerca” de abandonar sus esfuerzos para reactivar el acuerdo.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, opuesto al pacto, acusó a Irán de seguir “mintiendo al mundo”.
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