Washington. El fiscal especial Jack Smith pidió este lunes a una corte federal de apelaciones de Estados Unidos que anule el fallo de una jueza. Esta jueza desestimó los cargos contra el expresidente Donald Trump, quien se llevó documentos confidenciales al dejar la Casa Blanca.
Aunque la corte fallara a favor del fiscal Smith, un posible juicio de Trump no podría celebrarse antes de las elecciones del 5 de noviembre.
La jueza de distrito Aileen Cannon, designada por Trump, desestimó el caso el mes pasado. Argumentó que Smith fue nombrado ilegalmente, usurpando el papel del Congreso. Trump es el actual candidato republicano a las presidenciales.
Smith, quien fue nombrado por el fiscal general Merrick Garland, apeló la decisión de Cannon ante la Corte de Apelaciones del 11º Circuito.
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En sus argumentos de 60 páginas, Smith sostiene que hubo una “larga tradición de nombramientos de fiscales especiales” por parte de fiscales generales anteriores y que el Congreso respaldó esta práctica. “El razonamiento del tribunal de distrito también plantea interrogantes sobre cientos de nombramientos en todo el Poder Ejecutivo, incluidos los Departamentos de Defensa, Estado, Tesoro y Trabajo”, añadió Smith.
La defensa tiene ahora treinta días para responder. Luego, el fiscal especial dispondrá de tres semanas para formular un contraargumento.
Este caso es uno de los cuatro procesos penales abiertos contra Trump. Se le acusa de haber puesto en peligro la seguridad nacional al conservar documentos que incluían planes militares e información sobre armas nucleares en su mansión, en lugar de entregarlos a los Archivos Nacionales como lo exige la ley. Además, se le acusa de intentar destruir pruebas. Los cargos más graves se castigan con hasta 10 años de prisión.
Sin pronunciarse sobre el fondo del caso, la jueza Cannon se basó en la posición del juez conservador Clarence Thomas de la Corte Suprema. Thomas, en una sentencia dictada el 1°. de julio, concluyó que un expresidente tiene amplia inmunidad frente a un proceso penal.