Ciudad de México y Tegucigalpa. Fiscales federales estadounidenses acusaron al presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, de utilizar $1,5 millones de ganancias del narcotráfico para financiar su campaña electoral y ganar la presidencia en el 2013.
En un documento de 49 páginas presentado el viernes en el distrito sur de Nueva York se señala al mandatario como un coconspirador que trabajó con su hermano, Juan Antonio Tony Hernández, y el expresidente Porfirio Lobo “para aprovechar al narcotráfico a fin de consolidar el poder y el control en Honduras”.
En el documento se afirma que el presidente y su predecesor “dependieron del dinero del narcotráfico” para financiar campañas políticas y se mencionan “pruebas de corrupción a altos niveles políticos” .
El documento fue presentado apenas meses después de que otros escritos también entregados ante una corte federal mostraran que el actual gobernante y algunos de sus asesores más cercanos figuraban entre los objetivos de una pesquisa de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) , lo cual aumenta las dudas en torno a la aseveración del Gobierno estadounidense de que Honduras ha contribuido a frenar el flujo de drogas.
Washington mantiene un firme apoyo al gobierno de Hernández, al que ha canalizado millones de dólares en cooperación de seguridad para detener los envíos de cocaína a Estados Unidos desde Sudamérica.
Este sábado, la Casa Presidencial rechazó las afirmaciones de la Fiscalía y negó “categóricamente” que el gobernante haya recibido dinero del narcotráfico.
“El presidente @JuanOrlandoH ha liderado una batalla sin precedentes para liberar al país del narcotráfico como resultado de una alianza efectiva con los Estados Unidos y otros países”, expresó un comunicado oficial publicado en Twitter. Destacó que una de las armas para combatir ese flagelo ha sido la extradición, “la más temida entre los narcotraficantes”.
El presidente @JuanOrlandoH ha liderado una batalla sin precedentes para liberar al país del narcotráfico como resultado de una efectiva alianza con los EE.Uu y otros países, habiendo aprobado entre otras medidas, la más temida entre los narcotraficantes, la extradición. pic.twitter.com/FP7dIxWOVo
— Casa Presidencial (@Presidencia_HN) August 3, 2019
En otro tuit, se consignó: “El presidente de la República @JuanOrlandoH niega categóricamente las falsas y perversas acusaciones hechas por el traficante de drogas Alexánder Ardón”, citado por la cadena de televisión Univisión.
Protección para traficar
De acuerdo con el diario hondureño La Prensa, que reproduce este sábado el documento revelado por los fiscales, Tony Hernández le dijo a un testigo cooperante (que sería Alexánder Ardón, exalcalde del municipio de El Paraíso y copartidario del presidente) “que podrían formar una asociación particularmente exitosa basa en la protección” que les otorgarían Lobo y Juan Orlando Hernández si el Partido Nacional (al cual pertenecen ambos) ganaba las elecciones de noviembre del 2009.
Lobo venció y asumió el gobierno en enero del 2010. Fue sucedido, cuatro años después, por Hernández.
Tony Hernández expresó al testigo que confiaba en que su hermano reemplazara a Lobo en la presidencia y así “continuaría protegiéndolos”.
Esta protección apuntaba a garantizar la llegada de cocaína desde Colombia a Honduras. La droga entraría a través de la costa del Caribe, por el departamento de Gracias a Dios (noreste, fronterizo con Nicaragua). De allí sería trasladada a la frontera con Guatemala en helicópteros y camiones, según el documento de los fiscales.
En este se afirma que “el acusado (Tony Hernández)” aseguró Ardón"que los vehículos cargados de cocaína no serían interceptados debido a su acceso a la información de la Policía y el radar".
Hernández ganó la reelección en el 2017 luego de que la Corte de lo Constitucional anuló la prohibición para optar a un segundo periodo y tras imponerse en unos comicios muy cuestionados por supuesto fraude.