Panamá
Las oficinas de una empresa del expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014), quien se encuentra fuera de su país y enfrenta cargos de corrupción, fueron allanadas este martes en el marco de uno de los procesos que se le siguen, informó el despacho del fiscal de la causa.
Decenas de policías ocuparon las oficinas centrales de la empresa Importadora Ricamar, operadora de la cadena de supermercados Super 99, una diligencia dirigida por el fiscal, Abel Zamorano.
El despacho de Zamorano informó posteriormente, en un comunicado, de que el allanamiento guarda relación con una "investigación adelantada por la supuesta comisión de delitos contra la Administración Pública, donde aparece mencionado el señor Ricardo Alberto Martinelli Berrocal".
La diligencia tuvo por objetivo recuperar los libros de contabilidad de la empresa y el registro de personas que accedieron a las oficinas entre 2009-2014.
"La investigación está clara y está dirigida sobre el expresidente Martinelli y no guarda relación alguna con operaciones de la empresa", dijo al canal de televisión Nex TV Carlos Carrillo, del equipo de abogados de Martinelli .
Según el despacho del fiscal Zamorano, el allanamiento guarda relación con el caso de Cobranzas del Istmo, una empresa que durante el gobierno de Martinelli tenía los derechos de gestionar el cobro de la cartera morosa del Estado.
El máximo accionista de esa empresa, Cristóbal Salerno, manifestó durante un interrogatorio que entregó a Martinelli bolsas con dinero en efectivo proveniente de comisiones obtenidas por el cobro de impuestos.
La Justicia panameña pidió el 28 de junio a Interpol una alerta roja de captura por presunto espionaje y corrupción contra Martinelli, quien dice residir en Estados Unidos.
Martinelli , un multimillonario empresario de supermercados, acumula una decena de denuncias por escándalos de corrupción, delitos financieros y espionaje a opositores durante su mandato.
El exmandatario dice ser un "perseguido político" del actual gobierno de Juan Carlos Varela, su exaliado y enemigo de Martinelli desde que lo cesó en 2011 de su cargo de canciller.
El despacho de Zamorano descartó que el allanamiento "obedezca a cualquier tipo de presión de carácter político" y manifestó que la diligencia es "independiente, imparcial y completamente apegada a la normativa procesal penal".
Por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano, al que accedió como expresidente, Martinelli es procesado por la Corte Suprema y no por un tribunal ordinario.
"Es preocupante lo que estamos viendo en Panamá", dijo la esposa de Martinelli , Marta Linares, quien habló a periodistas frente a las oficinas allanadas, según Nex TV.
Si Martinelli "viene acá lo van a meter preso porque aquí no hay ley ni orden", añadió.