Ciudad de Guatemala
El Congreso de Guatemala resolvió el jueves no retirarle la inmunidad al presidente Otto Pérez Molina, luego de una denuncia en su contra por supuestos actos de corrupción.
Los diputados opositores no pudieron alcanzar el mínimo de 105 votos para retirarle el fuero y solo consiguieron 88.
Entre los sufragios a favor del mandatario estuvieron los del pleno de la bancada del Partido Patriota (oficialista) y el apoyo de dos diputados del Partido Visión con Valores —que lleva como candidata a la presidencia a la hija del ex dictador Efraín Ríos Montt, quienes no sufragaron, pero su presencia avaló el cuórum para la votación.
Luis Rabbé, presidente del Congreso y diputado del Partido Libertad Democrática Renovada, también votó a favor de que se archivara el caso.
El diputado de oposición Amilcar Pop había denunciado al presidente por su presunta implicación en una defraudación aduanera por varios millones de dólares.
Por su parte, el legislador opositor Leonel Lira manifestó su molestia por la forma en que se dio la votación.
"Parece que este país nunca va a salir adelante. Aquí se dio una negociación a compadre hablado" , dijo Lira, al referirse a que quienes votaron a favor de que el presidente conserve la inmunidad son algunos diputados opositores que tienen vínculos con militares ligados a actos de corrupción.
Jorge Ortega, vocero del mandatario, afirmó que la votación se hizo en el marco de la democracia y respetando los organismos del Estado.
"Con esto se dio por finalizada una etapa a través de una votación de los representantes del pueblo en el hemiciclo. Esta decisión le permite al ejecutivo desarrollar su agenda de transición sin ningún obstáculo de carácter político o judicial" , agregó Ortega.
Al general Pérez Molina le faltan cinco meses para finalizar su mandato de cuatro años.
Varios funcionarios de alto y bajo nivel de su gobierno se han visto involucrados en denuncias de corrupción, de las cuales una de las más importantes hasta ahora es la relacionada con la defraudación aduanera.
Según la Fiscalía y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), una estructura de funcionarios públicos y particulares recibió sobornos de empresarios para que los ayudaran a evadir impuestos.
Entre las evidencias se presentaron al menos 66.000 escuchas telefónicas en las que varios de los acusados nombran a "el presidente" , en alusión a que estaba al tanto de la defraudación. Pérez Molina ha dicho que es inocente de los señalamientos.
La Corte Suprema de Justicia determinó que había causa suficiente para iniciar el trámite con el fin de que el Congreso retirara la inmunidad al mandatario, y el Legislativo formó una comisión que determinó que había indicios para hacerlo.
Hay al menos 30 personas procesadas y detenidas por el caso.
La Comisión —un organismo de Naciones Unidas que investiga los cuerpos de seguridad paralelos en el Estado guatemalteco— determinó que Juan Carlos Monzón Rojas, ex secretario privado de la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, era el líder de la estructura. En medio del escándalo Baldetti tuvo que renunciar al cargo.
El diputado Lira dijo que el expediente será archivado en la Dirección Legislativa "por si alguien quiere de nuevo intentar revivirlo. Sin embargo, ya se sabe cómo están coludidas las fuerzas políticas en el Congreso" .